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Paro y gasto público: un experimento natural

28 Jun, 2011 - - @egocrata

Una de las ventajas que tiene el federalismo para las ciencias sociales es ver como la diversidad de políticas públicas te crea una amplia diversidad de experimentos naturales. En Estados Unidos tenemos cincuenta pequeñas unidades de gobierno (bueno, no tan pequeñas – California tiene 40 millones de habitantes) con una política monetaria común pero enorme autonomía fiscal y política. Cuando comparamos políticas públicas, podemos poner lo que ha hecho cada estado en un lado, los resultados de las medidas que analizamos en otro, y ver qué funciona mejor.

Durante la gran recesión los estados americanos han tenido que afrontar graves problemas fiscales. La crisis económica ha traído consigo una monumental caída de ingresos derivada de la caída de la actividad económica, y muchos se han despertado con enormes agujeros fiscales. Prácticamente todos los estados tienen prohibido por ley incurrir déficits (una idea estúpida, pero es lo que hay), así que legisladores y ejecutivos por todo el país debían decidir como equilibrar sus cuentas.

No hace falta decirlo, hay dos maneras de hacer esto: uno puede recortar gasto público con entusiasmo, o aumentar el gasto público respondiendo a los efectos de la recesión, pagando la diferencia subiendo impuestos. Es decir, una política fiscal conservadora por un lado, o una política fiscal no expansiva (no hay grandes déficits públicos) pero desde luego bastante más progresista. ¿Qué efectos tienen estas dos estrategias presupuestarias en la tase de desempleo, estado por estado? Veamos.

No está nada mal. Los estados que aumentaron gasto público, de media, tienen una tasa de para 1,2% inferior a los que sólo hicieron recortes. Una política fiscal neutral (ni siquiera expansiva) es más efectiva generando empleo que una contracción directa de gasto. Lo más curioso, por cierto, es que la tasa de empleo en el sector privado aumenta en los estados que gastan y disminuye en los que recortan; eso que cuando el estado retrocede los gloriosos emprendedores crean puestos de trabajo parece ser una tontería importante.

Ahora, antes que os emocioneis y salgais a la calle a protestar contra los recortes del gobierno, unos cuantos detalles. Estos datos son para Estados Unidos, y no pueden ser transferidos a la Unión Europea fácilmente. Para empezar, por mucho que los estados no pueden endeudarse, el gobierno federal americano sí puede hacerlo, y es el que paga cosas como las pensiones, desempleo y demás pequeños detalles. Los estados pueden estar haciendo encaje de bolillos para equilibrar cuentas, pero Washington se asegura que los estados peor parados sigan recibiendo transferencias. Segundo, los estados, prácticamente todos los casos, son esencialmente solventes; con la posible excepción de California (e incluso en ese caso, es sobretodo un problema político), no estamos hablando de gobiernos con agujeros fiscales completamente insostenibles, sino problemas contables bastante manejables. El problema de Grecia, Irlanda o España es la amenaza de un sector público realmente insostenible, algo que va bastante más allá. Tercero, cuando el sistema bancario de un estado americano se va a tomar por saco (léase, burbuja inmobiliaria en Florida) el rescate es federal, no local, así que nada de catástrofes a la irlandesa.

¿Qué quiero decir con ello? El keynesianismo y gasto público es estupendo, siempre que tus cuentas públicas gocen de buena salud y tu economía no sea una pesadilla de problemas estructurales y vivas dentro de la Unión Europea. Si has hecho los deberes antes de la crisis (caso de Alemania, Holanda, Austria o, en menor medida, Francia), puedes apretar gasto cuando es necesario, y amortiguar la recesión con cierta comodidad. Si te pasaste la vida tocando el trombón (caso de España, Portugal y Grecia), buena suerte; la recesión te hará insolvente.

Hay dos soluciones a este dilema: o todo el mundo hace los deberes (es decir, el pacto del euro) o un superestado europeo que haga que las crisis regionales sean cubiertas por una autoridad fiscal federal. Ahora mismo, me temo que sólo una de las dos es viable. Adivinad cual.


8 comentarios

  1. […] Paro y gasto público en el federalismo: un experimento natural politikon.es/materiasgrises/2011/06/28/paro-y-gasto-publi…  por Elwing hace 2 segundos […]

  2. Alatriste dice:

    Es evidente, Roger, el superestado europeo 😀

    Estoy bromeando, pero solo a medias. Hoy me siento particularmente cínico (un mal día, no preguntes) y tiendo a pensar que a los políticos europeos les resulta siempre _mucho_ más fácil vender a sus electores que tienen que hacer las cosas porque lo manda la burocracia sin rostro de Bruselas, que explicarles las auténticas razones. Hay que fastidiarse, pero que «Bruselas» sea impersonal al final es una ventaja considerable.

    Intentar «que todo el mundo haga los deberes» es entrar en otra ronda de discusiones interminables, jaleos, movilizaciones en las calles y de ver a las leales oposiciones (como la griega y la española) escurrir el bulto como cobardes pecadores de la pradera.

    No debería ser así, pero en la práctica casi estoy por decir que me parece más fácil un acuerdo para crear un tesoro europeo, unos impuestos europeos y un ministro de finanzas europeo (y donde digo europeo quiero decir de la eurozona), especialmente con unas normas que en la práctica digan que ese ministerio va a ser más germánico que el Festival de Bayreuth. Los británicos se iban a poner pálidos, pero eso es una vieja y querida tradición insular.

    Por cierto, Roger y los demás también ¿Es impresión mía o Sarkozy ha vuelto a hacerlo? Esas noticias acerca de que Sarkozy ha llegado a un acuerdo con los bancos franceses para que se impliquen en el segundo rescate de Grecia transformando la mayor parte de su deuda griega en bonos a 30 años se parece mucho a lo que hizo en Libia; si los demás vacilan, Nicolas avanza solo, planta sus cañones donde a él le parece y pone un cartel diciendo «Batería de los hombres sin miedo».

    No puedo evitarlo, el hombre me cae bien. Tal vez sea porque no tengo que sufrirlo a diario… pero me cae bien.

  3. Carlos Jerez dice:

    ¡El pacto, el pacto! ¿lo he adivinado? Ahora más en serio, no me acuerdo cual era el paper, pero recuerdo que decía que el impacto positivo de una política fiscal expansiva durante una recesión, es mayor cuanto más solvente sea el país. Vamos, algo de lo más lógico.

    La verdad, estoy jodido por lo que nos ha fallado Zapatero. Es que aún que hubiera reaccionado tarde a la crisis, en el 2009, le hubiera dado tiempo con 4 «cositas» a dejarnos mucho mejor. Una política fiscal expansiva más productiva que renovar aceras y coches y una reforma financiera eficaz para la primera mitad del año (sin apenas costes políticos), y tras la igualmente segura derrota de las europeas, echarle huevos y pasar unas reformas decentes del mercado laboral y de pensiones, y hubiera llegado la crisis griega y aquí la habríamos pasado sin apenas problemas como la mitad de Europa.

  4. nop dice:

    Me he mirado los datos y creo que el análisis está mal hecho (aunque me faltaria un grafico similar, pero con la variación de ingresos en el eje de ordenadas, para poder confirmarlo). Hay unos cuantos estados que han aumentando o mantenido el gasto que no han aumentado impuestos, dado que los estados no pueden tener deficit, esto solo lo pueden haber hecho si no han caido los ingresos.
    Por tanto una explicación pausible sería que donde no se ha perdido empleo no se ha necesitado recortar gasto. Para poder decidir si la correlación responde a este motivo o al expuesto en el articulo falta un análisis de flujos; qué fue primero, si la reducción en empleo (y por tanto en ingresos) o la reducción en gasto y sospecho que en la mayoría de los casos primero se ha dado una reducción en ingresos.

  5. Javier dice:

    Vaya, es tranquilizador ver que el viejo modelo del multiplicador sigue funcionando. Tanto oír ensalzar a Texas y denostar a California empezaba a hacerme dudar. Claro que a nivel federal las deudas se acumulan, y son las medidas de estímulo frente a la crisis las que pueden sembrar la siguiente burbuja. Como con las .com.

    Para ser totalmente científicos habría que seguir observando estos indicadores durante más tiempo. Al fin y al cabo, una crítica frecuente a las medidas keynesianas es precisamente que sólo valen a corto plazo, y que a más largo plazo lo que conviene es lo contrario, incentivar la inversión.

    También me preocupa que esos déficits salgan de la «caja común» federal. Caso de ser verdad eso de que washington siempre acaba sacando las castañas del fuego a los manirrotos. Tenéis mucha razón, los estados deberían poder endeudarse. Porque suena como si fuera un casi de libro de «tragedy of the commons». Unos chupan del bote y otros se aprietan el cinturón, pero a los segundos no les sirve para ahorrar, porque todos tienen el mismo bote (la fed), y los ahorros o dispendios son comunes.

    Si fueran actores racionales y tuvieran un «superestado europeo» eternamente benévolo que siempre rescatara a los necesitados, todos competirían a gastar lo más posible, como si fueran comunidades autónomas. A las que les pasa exactamente eso.

    Es por este motivo que no se crea esa superautoridad europea. Sería un «sala libre de la cárcel» eterno…

  6. Zhurrer dice:

    @Roger

    La primera mitad del articulo es excepcional, la segunda, sinceramente, no la entiendo.

    Los datos empiricos que traes solo justifican las conclusiones de la primera mitad del articulo.

    Este parrafo en particular:

    » El keynesianismo y gasto público es estupendo, siempre que tus cuentas públicas gocen de buena salud y tu economía no sea una pesadilla de problemas estructurales y vivas dentro de la Unión Europea. Si has hecho los deberes antes de la crisis (caso de Alemania, Holanda, Austria o, en menor medida, Francia), puedes apretar gasto cuando es necesario, y amortiguar la recesión con cierta comodidad. Si te pasaste la vida tocando el trombón (caso de España, Portugal y Grecia), buena suerte; la recesión te hará insolvente.»

    Es sencillamente un brindis al sol que te marcas, y que parece que intentas sostener cientificamente basandote en unos datos que no tienen nada que ver con eso.

  7. wiredlata dice:

    «El problema de Grecia, Irlanda o España es la amenaza de un sector público realmente insostenible (…)»

    Completamente de acuerdo.

    Lo que necesitamos son más bares y peluqueros y menos inspectores de trabajo y brigadas antiincendios.

    ¡Viva España cañí y olé!

    No hagamos como los irlandeses que fusilaban a impuestos al sector privado para mantener a millones y millones de funcionarios parásitos y gandules y así han terminado.

  8. […] de endeudamiento privado (189% PIB) y no público. Tercero, que los recortes bruscos en el gasto suelen asociarse con incrementos del desempleo en el corto plazo al perder la capacidad de estímulo del Sector Público, luego austeridad y empleo son difíciles de […]

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