Algunas notas rápidas sobre la situación ahora mismo en el desastre del techo de la deuda:

1. Todo el mundo tiene un plan:

Ahora mismo parece que medio Washington está redactando un plan para incrementar el techo de la deuda, y lo está haciendo sin hablar con nadie. Los dos principales es un plan de Harry Reid (líder de los demócratas en el Senado) y otro de John Boehner (líder de los republicanos en la Cámara de Representantes), que al menos están partiendo de un punto de partida parecido. Aun así, no es una señal que inspire demasiada confianza.

2. Contenido de los planes sobre la mesa:

De momento parece que los demócratas están, otra vez, avanzando decididamente hacia la retaguardia. El plan de Harry Reid recorta algo más de dos billones y medio en diez años, sube el techo de la deuda hasta el 2013 y no incluye ninguna subida de impuestos. La versión de Boehner es similar, pero sube el techo de la deuda sólo lo suficiente para unos meses (algo lo que los demócratas se oponen)buscando forzar otro enfrentamiento con Obama, porque esto es lo que realmente pone al GOP. Su plan es un arreglo complejo que refleja los problemas que la facción más talibán del tea party está causando al partido; es un encaje de bolillos complicado.

3. Algunos dicen que no es una mala opción:

Aunque la renuncia demócrata a subir impuestos a gente como esta (aviso: el artículo puede provocar Marxismo desencadenado) me parece una patética rendición, lo cierto es que Jonathan Chait tiene cierta razón al decir que no es un arreglo tan malo. El motivo es que el año que viene expiran los recortes fiscales de la era Bush (la principal causa del horrible agujero fiscal americano) , y los demócratas tienen en ese caso tienen una posición negociadora mucho más fuerte.

No estoy del todo convencido por este argumento, pero lo cierto es que un sector considerable del partido republicano realmente parece estar dispuesto a hacer que la economía salte por los aires para evitar que los millonarios paguen impuestos. Los demócratas tienen la opinión pública de su lado, pero a los conservadores más duros esto parece importarles un pimiento. Es un chantaje, ciertamente, pero el riesgo para la economía es demasiado grande.

4. ¿Que sucederá?

Lo más probable a día de hoy es que las dos cámaras aprueben dos planes distintos hoy o mañana, y tengan que acordar un plan de consenso a todo correr para votarlo antes que acabe el plazo. El riesgo, en este caso, es que algún senador especialmente cafre (DeMint o Paul, por ejemplo) decida bloquear la aprobación de la ley, alargando plazos hasta cinco días o más y superando la fecha límite.

En ese caso, creo que la Casa Blanca realmente recurrirá a la 14º enmienda, algo que deberían haber amenazado con utilizar mucho antes. Pero ese es otro tema.

5. El problema sigue estando en Europa:

Os dije que el último plan para rescatar Grecia era una chapuza. Los mercados de la deuda europeos comparten mi opinión. Esto no se ha acabado.