Llevo unos días sorprendido por la aparentemente absurda obcecación del PP de atrincherarse y cerrar filas alrededor de Camps tras su imputación. Si lo miramos desde un punto de vista objetivo, la cosa es sencillamente impresentable; nadie en su sano juicio se hubiera atrevido a proteger al inefable Blagojovich en Estados Unidos, y lo mismo debería suceder cuando un presidente autonómico es pillado haciendo algo que sea criminal o no, apesta de mala manera.
Aún a riesgo de atribuir a los capitostes del PP una inteligencia de la que carecen (llevan una temporada espantosa), creo que la idea se intuye en este artículo del País. Las europeas son unas elecciones en las que vota poca gente; sólo la gente más motivada va a las urnas. El centro es algo relativamente poco importante; lo que cuenta es conseguir que tus fieles salgan y voten. Rajoy y los suyos parecen haber decidido que la mejor forma de responder a los escándalos es explotándolos, haciendo que los votantes más fieles del PP se sientan atacados. Si el partido se siente asediado, supongo que piensan que la respuesta será cerrar los tercios y ponerse a sajar infieles.
La verdad, no sé si es eso lo que tienen en mente. La idea es totalmente idiota; es quemar la credibilidad del partido con el electorado en general sacar un resultado más o menos decente a corto plazo. Sin embargo, sabiendo la situación de Rajoy, la cosa tiene una cierta lógica absurda.
Si el líder del PP hiciera lo normal y lanzara a Camps (y medio partido) a los leones, muchos militantes no lo entenderían. La disciplina de partido es algo útil en ciertas ocasiones, pero tiende a producir cierta ceguera cuando es hora de soltar lastre. Hacer una purga en el partido, por mucho que sea algo que diera credibilidad al PP a medio plazo, sería leída a corto como una traición por parte de muchos militantes y notables, y una guerra civil por no pocos votantes, gracias a los alaridos clamando guerra de los defenestrados. Con las elecciones tan cerca, el resultado electoral sería probablemente malo -y letal, casi seguro, para Rajoy.
El líder del PP vive en la cuerda floja; no tiene el más mínimo margen de error. Todas las elecciones son un examen final; si pierde unas, el partido se lo sacará de encima. Eso crea un liderazgo (es un decir) que no puede planificar a largo plazo; sólo vive de ganar el debate del día y la elección de pasado mañana, pero no puede dedicarse a crear una base ideológica o un discurso coherente para gobernar, o ganarse la confianza de los votantes. El PP es un partido que vive del artificio y la tontería de la semana (aborto, ETA, los malvados nacionalistas), pero aparte de volver locos a los socialistas con sus chiquilladas, no son capaces de dar una imagen sólida.
La esperanza para Rajoy es que el lo estará haciendo mal, pero la economía va aún peor. Con un poco de suerte, los votantes estarán lo suficiente decepcionados con Zapatero que le darán su voto. El problema es que ahora mismo el país necesita algo más que eso; una victoria conservadora con una mayoría corta no hará las cosas más fáciles a nadie. La verdad, el PP necesita poner las cosas en orden, o el gobierno seguirá sin perder el tiempo gobernando. Así tenemos los debates políticos, hablando de cualquier cosa menos medidas concretas.
Bueno, además de todo, Rajoy le debe a Camps seguir conservando el puesto tras las anteriores elecciones.
Ahora, háblanos de Soria, por favor…
http://www.estrelladigital.es/ED/diario/147114.asp
¿también tenía que haber dimitido? ¿no tendría que dimitir ahora Juan Fernando López Aguilar?
Si es que la realidad os da igual… vosotros al mundo fantasioso que sale de los medios socialdemócratas.
Un cordial saludo.
Hay algo más, diría yo. Por algún extraño e ignoto motivo, el PP parece convencido de que habrá elecciones generales mucho antes de 2012…
Exactamente igual que se pasó toda la legislatura anterior pensando (es un decir) que ni de coña aguantaría Zapatero una legislatura entera en manos de los malvados nacionalistas aliados de ETA que querían romper España(TM) ahora parecen haberse convencido a sí mismos de que no aguantará, esta vez por el desgaste causado por la crisis… y eso, teniendo en cuenta que el PSOE tiene 169 diputados él solito y formaciones de izquierda radical que jamás votarían con el PP los suficientes para rebasar la mayoría absoluta, es mucho convencimiento.
Lo más probable es que les vuelva a ocurrir lo mismo, y que dentro de tres años vayamos a las urnas con la economía mundial en vías de recuperación y el PP fuera de juego, otra vez con un argumentario desfasado debido a haber apuntado toda la artillería contra un único, equivocado, y fugaz objetivo.
Vacilo al decir esto, pero la verdad es que sospecho que el peor problema del PP es el desprecio que siente por los demás, empezando por sus oponentes en el Congreso (ese «¡si no saben ustedes leer!» es tan sintomático como penoso) y acabando por el conjunto de los votantes.
Es hasta cierto punto típico que la izquierda piense que sus adversarios lo son por maldad o egoísmo, mientras que la derecha piense que lo son por estupidez o ignorancia, pero es que el PP va demasiado lejos.
Por cierto ¿Habéis leído ese análisis tan gracioso que circula por ahí según el cual los votantes de izquierda prefieren las películas de vampiros, y los de derechas las de zombies? Es tan perfecto que debe ser falso, pero… ¿Preferirán los verdes las de hombres lobo?
Cuánto optimismo Alatriste. Ojalá nos estemos recuperando para 2012 lo suficiente como para que el electorado sea optimista. Yo no lo creo.
Vellana: sí. Uno tiene que ser bueno y parecerlo; lo ilegal no es lo único inmoral.
Estoy de acuerdo, pero el parecerlo (malo) y las inmoralidades es algo que tendrán que juzgar los votantes, porque a lo mejor, lo que a mí me parece inmoral (lo que ha saltado hoy de Chaves, y durante años de la Junta de Andalucía) a la mayoría de los votantes andaluces no se lo parece, o bien lo aceptan porque piensan que el PP es peor.
Estoy de acuerdo en que, si crees lo que dicen los titulares de El País, Camps debe dimitir y al rato, ser condenado. Pero en ningún sitio de El País aparece, probado, que «El sr. tal, de orange market fue con Camps a no sé qué tienda, sacó un fajo de billetes, los puso encima del mostrador y Camps se llevó el traje.»y luego se publique una conversación grabada en la que Camps dice al tal fulano «Muchas gracias por el traje, ya sabes que como compensación te vamos a dar tal contrato».
O sea, que el problema actualmente, es que no sabemos si con Camps no lo parece (bueno) porque hay algo o porque alguien está interesado en que no lo parezca (que por supuesto que lo hay, como en el caso del sr. Soria). Por que imagina por un momento que al final no hay nada de nada de nada, es decir, Camps se ha pagado todos sus trajes, lo mismo que Costa y los demás, y, además, se verifica que todas las adjudicaciones a las empresas son conforme a derecho. Entonces, ¿qué dirás?
Desde luego a mí nadie me pillará pidiendo la dimisión de alguien del PSOE por apariencias; allá el sr. en cuestión y el partido en cuestión; es más, ni siquiera por hechos probados que son jurisdicción de los votantes (por ejemplo, meternos en una crisis de caballo, cambiar de criterio según sopla el aire, etc.).
Un saludo.
Joder, con Vellana es que se aprende un huevo… el otro día definía la izquierda como gente que no traga con «los mensajes de esfuerzo, de innovación, de asumir riesgos» y «con una mentalidad del mínimo esfuerzo, de papá estado me lo arregle, de no moverme de mi pueblo.» … (esto último me encanta)…
Ahora nos informa que ha sido el PSOE el que nos ha metido en la crisis… ni siquiera el Gobierno, no… el PSOE!!!
Chaves (Manuel), vete ya!!
La verdad, yo soy el primero en decir que el PSOE debería perder las elecciones en Andalucía. No sé por qué crees que sacar a Chaves (un tipo que no me cae nada bien) me va a molestar :-).
Sobre el caso Camps, me parece que las épicas llamadas de teléfono con el bigotes le deberían hacer dimitir. Por patético. :-P.
[…] elección del candidato y algunas de sus (in)decisiones durante la campaña, parece seguir viviendo únicamente en el presente continuo, en el ataque al monstruo de la semana. Como un cylon político que resucita después de cada […]
[…] votan sólo los más fanáticos. En vista de los resultados en Valencia puede que el “efecto asedio” parece haber funcionado. También creo que Rajoy hubiera sido menos protector con Camps en […]
[…] votan sólo los más fanáticos. En vista de los resultados en Valencia puede que el “efecto asedio” parece haber funcionado. También creo que Rajoy hubiera sido menos protector con Camps en […]