Ayer Obama pronunció su primer discurso ante el plenario del Congreso. No fue un discurso del Estado de la Unión (los presidentes no lo pronuncian en su primer año), y el contenido fue ligeramente distinto; Obama presentó su agenda para los próximos meses a los legisladores y a todo el país. Como es costumbre, todas las cadenas americanas lo retransmitieron en directo, dando al presidente una hora de cobertura sin interrupciones hablando directamente con el electorado.

Para los que siguieron la campaña, la mayoría del discurso no tuvo demasiadas sorpresas. Las tres prioridades de las que habló en la campaña una y otra vez (educación, energía y sanidad) eran familiares. Su programa es ambicioso; una reforma en profundidad de la educación, la introducción de límites en las emisiones -probablemente mediante un impuesto-, y la creación de un sistema de sanidad universal son palabras mayores en Estados Unidos. Los tres son problemas urgentes, así que poco que objetar.

Las grandes novedades estuvieron centradas en la respuesta a la crisis económica, algo que en agosto o septiembre -casi- nadie imaginaba que acabara siendo tan grave. La administración ha hecho un buen trabajo vendiendo el plan de estímulo fiscal (las encuestas serias le dan un buen nivel de aprobación. Nota: Rasmussen no son serios al hacer esta clase de preguntas), y Obama continuó machacando a los republicanos con ello. Ayer el presidente empezó la campaña para vender el plan realmente imprescindible y mucho menos popular, el rescate del sistema financiero, y el tono me sorprendió gratamente.

No, no pronunció la palabra que empieza por «N», y siguió con ambigüedades sobre qué pretenden hacer. Ya expliqué que me parece que todo esto se deriva de un cálculo político, no de intenciones reales; sospecho que acabarán nacionalizando varios grandes bancos de facto bajo otro nombre. Lo mejor del discurso, y algo que muchos políticos deberían hacer más a menudo, es que Obama explicó por qué este rescate es necesario tratando al público como si fueran adultos, no niños que sólo entienden frases sencillas y cortas. No sé si lo recordaréis, pero Obama lleva haciendo esto desde hace bastante tiempo; ya en las primarias mencionaba su sana costumbre de tratar a los votantes como seres inteligentes, no primates instintivos.

Sorpresa, sorpresa: funcionó bien. Sé de sobras que las encuestas instantaneas son a veces dudosas, pero los márgenes de aprobación son muy concluyentes. Los votantes aprecian que se les hable directamente, parece. Y sí, ya sé que Obama es muy popular y que su capacidad oratoria es capaz de vender -casi- cualquier cosa, pero el discurso a veces fue más una lección de economía que una diatriba mitinera.

Tras el discurso adulto de Obama llegó la respuesta republicana. Bobby Jindal, gobernador de Louisiana, 37 años y estrella ascendente del partido, explicó la alternativa de su partido, y el contraste fue extraño. Para empezar, Jindal no es un buen orador. Comparado con el presidente, casi nadie lo es, pero Jindal estuvo realmente mal, con un tono ligeramente amateur. Cuando te comparan con Kenneth (de 30 Rock; si no sabéis quién es no os preocupéis, es sólo la mejor comedia americana desde Seinfield) algo has hecho mal.

El problema más grave, sin embargo, fue el tono. Jindal no estaba hablando con adultos; estaba repitiendo eslóganes para niños de nuevo años. El discurso fue una retahila de lugares comunes, una especie de grandes éxitos de la retórica antiestatalista y obsesiva petición de bajar impuestos de siempre. Ninguna concesión para el argumento racional; el discurso se limitó a los argumentos simplistas tontos que los republicanos llevan décadas repitiendo y que les han dado dos maravillosas derrotas electorales.

Espero que alguien les diga que esto de tratar al electorado como idiotas no funciona. Siguen repitiendo los errores de McCain como un mantra. Y por Dios, que no presenten a Jindal. Este tipo no llegará a ninguna parte.


4 comentarios

  1. citoyen dice:

    ¿Sabes dónde se puede ver el discurso? he mirado en youtube pero no lo he encontrado

  2. Roger Senserrich dice:

    ¿Has mirado en la página de internet de la Casa Blanca?

  3. […] anterior ha salido la idea de escribir una serie de artículos entre varias bitácoras sobre todo lo que no funciona y es horrible del sistema político americano. He estado pensando sobre ello hoy, y  creo que es un poco […]

  4. […] anterior ha salido la idea de escribir una serie de artículos entre varias bitácoras sobre todo lo que no funciona y es horrible del sistema político americano. He estado pensando sobre ello hoy, y  creo que es un poco […]

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