La invasión americana de Afganistán ha sido un éxito rotundo. La cultura, los valores, las instituciones de Estados Unidos han sido abrazados por los afganos, hasta el punto de adoptar grandes tradiciones económicas y sociales con una celeridad increíble.

Un ejemplo claro y obvio: el Kabul Bank, el banco más grande del naciente sistema financiero afgano, está al borde de la bancarrota víctima de fraude, corrupción e incompetencia regulatoria del gobierno del país. Y sí, están pidiendo un rescate desde el sector público que puede llevar el estado afgano a la bancarrota.

Lo dicho, están adoptando las tradiciones americanas algo serio.