Artur Mas (y la gente de CiU en general) tienen la mala costumbre de tener ideas en principio sensatas pero que a la práctica se quedan cortas. La semana pasada hablaban de llevar el concierto económico como propuesta central en su programa de financiación autonómica, algo que no deja de ser una reforma necesaria… siempre que no la limitemos a Cataluña, como defiende CiU.

El concierto económico vasco (y Navarro) es un sistema de financiación muy sencillo: el gobierno vasco escoge qué nivel de servicios sociales quiere ofrece, escoge el nivel de impuestos, los recauda y paga por lo que hace. Aparte, el estado pasa una factura al gobierno de Vitoria cobrándole por los servicios que presta en su territorio, más (en teoría) un porcentaje extra para solidaridad territorial.

El resto de comunidades autónomas tienen un sistema bastante más torpe y difícil de entender. El estado recauda todos los impuestos, con los gobiernos regionales recibiendo un porcentaje fijo de varios tributos (IRPF, IVA, etcétera). Cada gobierno autonómico escoge su nivel de gasto público, y puede añadir pequeños recargos a algunos impuestos, pero habitualmente no se esfuerzan demasiado por pagar sus caprichos o protectos por la vía fiscal – es más fácil y rentable políticamente ir a Madrid a protestar que no reciben suficiente dinero.

El resultado es un sistema barroco y complicado donde el estado recauda, pasa su porcentaje, añade una cantidad más o menos aleatoria adicional para que las autonomías no protesten, otro para cubrir competencias que no estaban antes ahí, más una cuota de solidaridad extra en algunos sitios. Es un sistema incomprensible que crea todos los incentivos del mundo para que las autonomías vivan por encima de sus posibilidades – al fin y al cabo, ellas gastan y deciden qué servicios dan, pero quien paga la factura es el estado.

Generalizar el sistema de concierto económico cambiaría esta estructura de incentivos de inmediato. Las autonomías que quisieran construir pirámides de Egipto, Copas América y circuitos de F1 se pagarían los caprichos de su bolsillo. Si alguien quiere subvencionar el impuesto de circulación a coches de lujo tiene que ir a los votantes y explicar cómo va a cubrir ese gasto con otros impuestos. El estado podría concentrarse en hacer (y cobrar) por lo que hace bien, sin compartir gastos en servicios que no presta. Por añadido, podríamos arreglar el extraño sistema que hace que dos de las comunidades más ricas sean las que menos contribuyan a la solidaridad territorial.

Los nacionalistas catalanes, cuando piden el concierto económico, suenan como una minoría en busca de un privilegio. Si hablaran de genelarizar un sistema de corresponsabilidad fiscal para todo el estado, proponiendo extender el concierto vasco, el discurso sonaría mucho mejor fuera de Cataluña – y abrirían un debate necesario. Simplificar el sistema de financiación autonómica (aclarando, en consecuencia, el sistema fiscal) es una reforma necesaria a medio plazo, y los nacionalistas harían bien en generalizar el debate, en vez de recurrir al «qué hay de lo mío».


28 comentarios

  1. Miguel dice:

    Totalmente de acuerdo salvo en una cosa: viendo el tono de desprecio absoluto en que los nacionalistas suelen mencionar el «café para todos», que parece como si quisieran privarnos a los demás de lo que ellos quieren para sí, no creo que los nacionalistas catalanes estén por la labor de proponer el concierto económico como medida general para todo el país.

    [offtopic] Qué bien me han venido tus artículos sobre LAV para la clásica tertulia de la hora de comer… la tendencia Egocrática se extiende por el mundo…

  2. Jordi P. dice:

    Yo no soy un fanático de CiU, pero creo que no les corresponda a ellos proponer la generalización del concierto económico. CiU tiene, las pocas veces en las que se mojan sobre el asunto, un programa en el que defienden una especie de confederación. Cuando proponen el concierto económico lo hacen para Catalunya ya que es su ámbito de trabajo, pero eso no implica que el resto de España pueda elegir el modo de distribución económica que le plazca.

    A mi si esta propuesta se hubiera hecho hace 10 o 15 años y hubiera sido apoyada por alguno de los partidos estatales me habría parecido fantástica y generalizable a todos. Más justa y más clara. A día de hoy con las posturas que mantienen PP y PSOE, me parece una pérdida de tiempo y una forma más de volver a calentar los ánimos en España. Tampoco veo a la sociedad catalana con fuerzas ni ganas para plantear esta reforma.

  3. Buenas. Estupendo espacio. Enhorabuena.

    Si os qieda tiempo, ahí va el mío:
    http://lamiradaperpleja.blogspot.com
    El último artículo, un perfil sobre Ahmadineyad.

    Nos leemos.

  4. francisco dice:

    Como idea no está mal, pero conociendo este santo país en diez años tendriamos el caso contrario. La administración central pidiendo y las CCAA negandose a pagar la factura.

    Entonces la situación sería la opuesta, las CCAA con dinero y compitiendo a no pagar al estado (Euskadi model) y el estado endeudandose como una burra para no discutir las mensualidades.

  5. Ian Curtis dice:

    El «café para todos» que apunta Miguel es la clave. No puede haber en toda España el mismo nivel sin necesariamente «afrentar» a los nacionalistas. Lo dicen claramente, continuamente (y son los que mandan). En cuanto hubiera ese sistema en todo el Estado, ellos querrían lo siguiente, ya eso no valdría para ellos (véase las autonomías, requerimiento nacionalista en la transición, que tras generalizarse a todo el Estado a ellos ya no les vale).

  6. La base del nacionalismo es la búsqueda del privilegio, no de la igualdad.

    Todos los nacionalistas odian la igualdad con toda su alma.

  7. Per[la|pau]* dice:

    (A Ian Curtis)
    Es lo que tienen los prejuicios, que falsean la realidad para adaptarse a las creencias propias.

    Cuando uno pide que no le quiten tanto, no vale responder que no puede ser, porque cuando ya no te quite querrás quitarme tú a mi.

    Esto es de un cinismo absurdo totalmente indigerible. Ante el cual no se me ocurre mejor respuesta que el clásico «se cree el ladrón que todos son de su condición».

    (A Miguel)
    Lo insoportable del café para todos es que sirve para argumentar que tal cosa no la puedes querer para tí porque yo no la quiero para mi. Sobretodo cuando resulta que después de árduas negociaciones yo consigo algo de lo demandado e immediatamente tu reclamas lo mismo, y lo obtienes a coste (negociador) cero.

  8. Miguel dice:

    (A Per[la|pau]*)

    Si alguien argumenta eso, mal va, pues estaría diciendo que no entiende que organizaciones/personas/partidos puedan tener intereses diferentes (y por supuesto deriva que los suyos son los únicos legítimos).

    Sin embargo, si la organización/persona/partido/región/nacionalidad X consigue un derecho, ¿con qué motivo se va a negar a que los demás puedan disfrutarlo, si les interesa? ¿porque no lo pelearon lo suficiente en su día? A lo mejor para ellos no era tan prioritario.

    Algo que por ejemplo nunca me ha gustado son los derechos forales de que disfrutan las provincias vascas y Navarra. ¿Por qué esos territorios y los demás no? ¿Por accidente histórico – un fuero otorgado por un rey por la gracia de Dios? Siempre he pensado que sería mejor evaluarlos, y si son buenos, extenderlos a todo el que quiera; y si no, estudiar la forma de modificarlos.

  9. Marc Fargas dice:

    Roger, que posibilidades hay de lograr algo estos días (sea un debate necesario o una conversación en un pasillo) en este aspecto con PSOE y PP?

    No digo que la finalidad o el resultado deba ser el que dices, el concierto para todos, (y supongo que si se llevase algo al Congreso se acabaría con algo tipo «Quien quiera que se apunte al concierto y quien no que siga como hasta ahora»). Pero a 1-2 meses de las elecciones de la Generalitat no creo que haya que poner el enfásis en quedar bien con el resto de España.

    «Aconseguir un model de finançament basat en el Concert econòmic per a Catalunya»
    «Aconseguir un model de finanáment basat en el Concert econòmic per a les comunitats Autònomes» (o per a Espanya)

    Estas dos frases, en Catalunya, y para mucha gente no suenan igual. Persiguen, para Catalunya, lo mismo, pero algunos dirían que el resultado no es el mismo.

    Almenos intentan mejorar el sistema de financiación autonómico, si otras comunidades lo desean ya habremos avanzado algo.

  10. Alberto_MH dice:

    El problema con el sistema de conciertos es que rompen el sistema de funcionamiento de las comunidades. Una vez que los gastos se empiecen a repercutir sobre los votantes la compra de votos y el reparto de enchufes se vuelve mucho más complicado. De hecho, cuando Borrell propuso algo similar* hace ¿veintitantos años? (¡joder! ¡que viejo soy!) Pujol se negó totalmente y lo bloqueó.

    *En realidad era la posibilidad de poner una recarga autonómica sobre el impuesto de la renta, pero el efecto era el mismo.

    PD: Este sistema se debería generalizar no solo para todas las comunidades, sino también para ayuntamientos y diputaciones (las que quedan) que también gastan lo suyo y luego van a reclamar a papá estado.

  11. Jordi P. dice:

    Sobre la discusión acerca de la expresión «café para todos», debo decir que yo nunca la había interpretado del modo en que se está planteando aquí. Cuando los partidos catalanes se quejaban del café para todos, no era (en mi opinión) por no ser generalizable sus propuestas sino porque significaban homogeneizar a la baja sus peticiones. Es decir si alguien pedía un te, se acababa sirviendo un café para todos básicamente porque la mayoría (o más concretamente Andalucía y Extremadura que tenían mucho peso en el PSOE) ya les iba bien un café.

    Creo que algunos de los que opináis alegremente sobre el nacionalismo (normalmente repitiendo frases y tópicos) no habéis profundizado nunca en el tema. Por ejemplo el hecho de que un servicio se gestione desde Madrid o Barcelona no implica para el ciudadano por sistema una pérdida de derechos. Los ciudadanos de la Rioja (por decir algo) tienen fuerzas de seguridad y por tanto el servicio «policial» igualmente garantizado aunque no tenga policía autonómica. Del hecho de que la forma de gestión sea distinta no se deduce necesariamente pérdidas de derechos o servicios para el ciudadano.

    Evidentemente sí hay un agravio en el caso del Concierto. Si se asume el concierto estoy totalmente de acuerdo con Miguel en que debe ser para todas aquellas CC.AA que lo quieran implantar. Para mi los conciertos económicos actuales son el ejemplo más grave de desigualdad de derechos de distintos ciudadanos en España.

  12. Alberto_MH dice:

    Jordi,

    Si el problema con el «café para todos» fuera el que dices no hubieran protestado porque se igualasen las competencias de otras comunidades con las suyas y bien que recuerdo como lo hicieron en el caso de los nuevos estatutos (aunque estoy de acuerdo con que la «Clausula Camps» era una ridiculez)

    Por otra parte, si realmente da lo mismo que un servicio se gestione desde Madrid o Barcelona no tendría sentido embarcarse en un proyecto tan costoso y complejo como crear las comunidades autónomas. Lo cierto es que, pese a esos problemas, muchos servicios se gestionan mejor de forma descentralizada (y, según el que sea, a nivel local)

  13. Alberto_MH dice:

    Por cierto, que la corresponsabilidad fiscal también es buena que se aplique hacia arriba (Vamos que estoy de acuerdo en que la Unión Europea cobre impuestos)

  14. francisco dice:

    Jordi,

    Los nacionalistas han dicho abiertamente que «las naciones» tienen que ser diferentes de las que no lo son, y ahi radica siempre la insatisfacción que tienen porque el estado optó (bueno Felipe Glez lo hizo) en que todos podían ser iguales.

    Así que estamos jodidos, hasta que se acabe el nacionalismo llorica o hasta que se independicen, uno de los dos imposibles que llegue antes.

  15. Jordi P. dice:

    Lo primero que yo os pongo en duda es a quién os referís cuando decís «los nacionalistas». Lo que se ve como nacionalismo desde un sitio no se ve desde otro y dentro de los que llamáis nacionalistas hay numerosas variedades. Para mi por ejemplo el PP, el PSOE y UPyD son partidos nacionalistas españoles. Para algunos comentaristas españoles Montilla es un nacionalista catalán extremo. Yo creo que si Rivera de Ciudadanos ganara las elecciones en Catalunya, algunos comentaristas le llamarían nacionalista cuando llevara una semana de Presidente de la Generalitat.

    Las quejas de la mayoría de los que se podrían considerar «nacionalistas» catalanes respecto a la última tanda de estatutos no eran que otras comunidades pidieran los mismo, sino que se comportarán de forma mezquina. Me opongo a lo que pide Catalunya, pero quiero lo mismo y encima sin apoyar la reivindicación inicial. Es decir recurro al constitucional o amago con hacerlo, pero redacto un estatuto donde pido lo mismo. De esta muestra de coherencia no leo demasiadas quejas. Si una sola comunidad autónoma se hubiera puesto de lado de las peticiones catalanas de forma clara y honesta, los políticos catalanes habrían estado más que contentos y la gente ya no te digo.

    Francisco, a mi no me gustan las desigualdades y por tanto como tú he llegado a la conclusión que la única solución para todos por difícil y larga que sea, es la independencia. Yo no sé si algún nacionalista ha dicho que las naciones tienen que ser diferentes (si es así yo no lo comparto), yo lo que se es que yo por el hecho de ser miembro de la «nación» (llamadle sociedad o entidad o cualquier cosa que no os moleste) catalana tengo menos derechos que un ciudadano de otras comunidades de España.

  16. francisco dice:

    Jordi,

    Pretender ser independentista y a la vez integrar una UE más poderosa y federal (como venden muchos en Cataluña) es querer estar repicando y en misa.

    Las mismas estùpidas movidas se tendrían en la UE, si yo quiero la PAC francesa, los derechos religiosos de Irlanda y el cheque britanico. Denunciando a Barajas por competir con ayudas contra el Prat por la participación de Cajamadrid en Iberia y que si el AVE español debe pasar por Barcelona y no por Irún camino de Paris.

    La única diferencia es que en la UE con el tamaño de Cataluña eres un pegotillo al que no se hace demasiado caso. Y mira, a lo mejor ese es el problema, que se le hace demasiado caso.

    Yo estoy tan aburrido que les daría la independencia, eso si. Las condiciones no las fija el que se va a su gusto y la entrada en la UE lo siento pero lo de que es gratis y va incluida la ampliación a 28 no está nada claro.

  17. Jordi P. dice:

    Desgraciadamente casi todos estamos ya aburridos unos de otros. Nosotros somos los pelmas que siempre se quejan, en cambio el resto de España es un ejemplo para todos. Cada día se oyen propuestas políticas sumamente atractivas, la gestión económica es genial y las instituciones democráticas funcionan que son una maravilla. En fin, no nos aburramos más mutuamente (y a los demás) y por mi dejemos el tema que ya ha quedado clara la postura de cada uno.

  18. Hejo dice:

    Generalizar el Concierto económico significa transformar España en una federación con unos gobiernos federales muy fuertes. Vamos, una confederación. Ni al PP ni al PSOE, ni a UPyD, les gusta esta opción. Por ideologías, por nacionalismo español, por la alteración de los flujos fiscales que supondría…
    Conceder el concierto sólo a Catalunya, significaría un debilitamiento del estado central (20% del PIB que escapa en su mayor parte a tu control fiscal). Y el riesgo evidente, que por «la fórmula Camps» el modelo tienda a generalizarse. Por las anteriores razones, la respuesta será de nuevo que No.
    Un Concierto es algo tan poderoso que altera la estructura del estado y todos los equilibrios e intereses que la sustentan – y sí, también de los que chupan de ella. Y ni PP ni PSOE ni UPyD, ni muchas grandes empresas quieren ver una alteración radical del juego de equilibrios actual. Por ideología, por nacionalismo español y por intereses y estrategias de poder.
    Nada asusta tanto como un cambio en profundidad del escenario debido a las incertidumbres que crea.
    No estoy hablando de si tal sistema sería mejor o peor para los ciudadanos sino de lo que implican tales decisiones. Y por qué, en mi modesta opinión, durante muchos años la respuesta a las peticiones de nuevos Conciertos va a seguir siendo No.

    Un apunte sobre el nacionalismo. Ser nacionalista en sí no es ni bueno ni malo. La cuestión importante es cómo lo eres, de qué forma se expresa tu nacionalismo, y qué concecuencias implica. Mientras seas respetuoso con los demás, mientras como consecuencia de tu nacionalismo no discrimines ni dejes de respetar los derechos humanos… nada ni nadie puede oponerse a que lo ejerzas plenamente a tu entera libertad. Si prohibes o limitas su ejercicio, estás limitando, estás actuando contra la libertad de otro.

  19. Ian Curtis dice:

    jeje Jordi se pregunta por quién son esos supuestos nacionalistas catalanes… Casi nadie… Ni yo ni nadie. Líneas después él mismo se confiesa… independentista!

    Hejo: federación NO IGUAL a confederación.

  20. PEr[la|pau]* dice:

    Ian, y aún así los habemos que creemos que tu nacionalismo es más evidente y, sobretodo, peligroso que el de un independentista. Quizá en un sentido etimilógico estricto del término la discusión no estaría tan decantada, pero si nos referimos a la corriente «ideológica» que desenvocó en las guerras mundiales del siglo pasado es evidente que la demagogia manipuladora y desprecio hacia lo ajeno que muestras es bastante similar.

  21. Jordi P. dice:

    Ian,

    Me debo expresar muy mal porque veo que no se entiende lo que he escrito. En uno de mis primeros comentarios lo que quería reflejar es que adjetivar a alguien como nacionalista es algo relativo, en ningún caso he negado su existencia ni en Catalunya ni en España. Supongo que todos tenemos grados de nacionalismo en uno u otro tema, y como dice Hejo, en un comentario que subscribo totalmente, no es necesariamente malo.

    Si te quieres referir más concretamente a mi postura ideológica yo nunca me he considerado nacionalista, aunque entiendo perfectamente por la relatividad que he explicado antes que muchos me vean como tal. De hecho mi actual apoyo a la independencia es el reconocimiento de un fracaso y no una pasión especial. Siempre me he considerado catalán igual que otros se consideran franceses o suecos, pero de eso no deducía la necesidad de tener un estado propio. Esperaba que se pudiera ser catalán con normalidad en el marco de un estado español o de la Unión Europea y ahora creo que esta opción no es posible. Creo que la mejor solución para España y por supuesto para Catalunya es el divorcio. Pero repito, no nos engañemos, un divorcio es el reconocimiento del fracaso de un proyecto.

  22. Javier dice:

    Varias cosas:

    – Desde Cataluña se critica el café para todos cuando éste sirve de excusa para boicotear los intentos de Cataluña, a través de su gobierno, de progresar. El café para todos es nefasto cuando la mayoría manda y en realidad no quiere café para nadie, que es lo que pasa en España.

    – El nacionalismo catalán no quiere ser mejor que nadie, sino simplemente ser. Las críticas constantes a lo que aquí se hace, y lo de los toros es un ejemplo flagrante de todo eso, no hacen más que confirmar que se fiscaliza y rechaza lo que aquí se haga, les afecte o no. Y sólo se argumenta la supuesta igualdad de todos los españoles no para que todos ganemos en derechos, sino para que los catalanes no hagan algo.

    Señores, todo esto ya da igual. La solución, como han dicho, es la independencia de Cataluña. Con la independencia ganamos lo siguiente:

    – Se cumplen los deseos del señor Roger de que tengamos un régimen fiscal como el concierto vasco. Será el concierto catalán con nosotros mismos.
    – No perderemos el tiempo discutiendo sobre este tema.
    – Podremos dejar de aguantar críticas constantes, muchas veces sin ningún fundamento racional y fruto de la pura mala leche, a todo lo que proponemos e intentamos hacer.
    – Dejarán de llamarnos nazis por aplicar de forma más que moderada aquello que los países soberanos hacen de manera clara y contundente, como con la ley del cine.
    – Los catalanes podremos decidir qué queremos ser sin tener que pedir permiso a nadie.

    Para ustedes también hay ventajas:

    – Podrán dedicarse a hablar de otros temas, si es que los tienen.
    – Podrán centrarse en resolver sus problemas, que no son pocos.
    – Podrán construir un país a su gusto sin los problemas derivados de tener minorías culturales en su país (si otros siguen los pasos de Cataluña y liberan a España del rancio nacionalismo periférico, claro).

    Ventajas para todos, ya ven.

    PD: Lo que más me alucina es toda esa pátina de intelectualidad bajo simples tópicos sobre el nacionalismo, que nunca es el suyo y siempre es el de los demás, que no se sostienen bajo el menor de los criterios racionales. De entrada los catalanes queremos ser catalanes, no mejores o peores que nadie. Si el nacionalismo, como dicen ustedes, consiste en sentirse superior, entonces lo de Cataluña no es nacionalismo, y en cataluña no hay apenas nacionalistas.

  23. jeriko dice:

    De aleatoria nada… el gobierno hace lo siguiente… donde me votan. doy pasta… donde no me votan… castigo..

  24. […] del Estado y Comunidades Autónomas a los ayuntamientos. Y yo me planteo, gracias a una excelente aunque controvertida entrada en Materias grises, si no sería conveniente que el concierto económico que existe con País Vasco y Navarra se […]

  25. […] del Estado y Comunidades Autónomas a los ayuntamientos. Y yo me planteo, gracias a una excelente aunque controvertida entrada en Materias grises, si no sería conveniente que el concierto económico que existe con País Vasco y Navarra se […]

  26. […] el Blog Salmón les ha gustado eso de extender el sistema de concierto económico a todas las autonomías, y piden ir un paso más allá, aplicando […]

  27. Vilanova dice:

    Es extraño que los mismos que dicen estar hartos de los catalanes, son los que se empeñan en que nos quedemos. Si de verdad quieren librarse de nosotros de una vez y quedarse tranquilos, ¿por qué no firmamos los papeles del divorcio como naciones civilizadas, y nosotros ya nos apañaremos con la UE, la ONU y quien haga falta? Respuesta: obviamente, porque necesitan el dinero de los impuestos de los catalanes para sus fastos, dispendios y pésima gestión pública. Mientras necesiten la teta catalana para que ellos sigan mamando de nuestro dinero, seguirán teniéndonos recluidos en esta vetusta nación española.

Comments are closed.