Bueno, ya sé que voy tarde. Aparte de eso, en estas fechas uno debería hacer la banda sonora del 2004, pero la verdad, mi 2004 ha sido tan caótico, absurdo y en ocasiones directamente malo que no me apetece ponerme a bucear en el disco duro y repasar el año. Más contando que diciembre ha resultado ser estupendo, en cierto modo. Pasemos a las canciones:
Para los interesados, por cierto, no me he roto nada esquiando, Andorra es casi tan raro como Gringolandia, y me voy para el país de locos el sábado. Se siguen admitiendo especulaciones locas en los comentarios sobre qué hay detrás de la música.