En estos mismos momentos (miércoles 25 de enero, 19:57) se está leyendo la sentencia que declara a Francisco Camps no culpable del delito de recibir trajes como regalo. El jurado popular así lo ha decidido. Más allá de valorar la calidad jurídica de la decisión, ¿tendrá esto algunas consecuencias políticas, particularmente para el PP valenciano?
Sinceramente, lo dudo. En el (poquísimo) tiempo que el Molt Honorable ha estado fuera de juego se ha consolidado un proceso que ya comenzó hace un año: las costuras de su gestión han quedado al descubierto. Y qué costuras. Es cierto que el desastre en el que ha desembocado el gobierno popular en Valencia se forjó bajo la batuta de Zaplana, pero al fin y al cabo la explosión (paro, estado de bienestar dejado de lado, obras y eventos con pérdidas millonarias, déficit y deuda insostenible) ha sido en su cara. Y con su cara y la de su equipo. Fabra no se ha preocupado lo más mínimo de ocultar estas vergüenzas, la verdad (para lo que podría haber hecho). A la vez, lleva un tiempo haciendo recambios y montando su equipo. Así que ni dentro de la Generalitat ni de cara al público, Camps tiene nada que hacer. El «efecto Lázaro» (resucitado) lo tendrá, el momento mediático probablemente también, pero ya está.
¿Y dentro del PPCV? Camps tiene unos cuantos fieles, pero esa fidelidad dependía sobre todo de su capacidad de colocación dentro y fuera del partido, en las Administraciones. Capacidades que ya no tiene. Además, lo más probable es que tenga veto desde Génova, a quien le conviene mostrar la imagen más seria posible. Lo cual, desde luego, no incluye un Camps como Ministro. Puede que me equivoque, pero veo poco más.
Dedicado a Roger, Francisco et al.
Lo que es ciertamente increíble en el caso Camps es el linchamiento masivo que ha habido contra este hombre, sin una sola prueba, por un tema ciertamente menor. Y todo ¿por qué? Porque ha habido un periódico, sin ninguna moral, que a instancias de un partido, sin ninguna moral, con el único objetivo de conseguir votos ha montado un juicio paralelo y para lelos. Y lo aún más alucinante es el seguidismo acrítico de gente más o menos inteligente, que, a pesar de las lógicas advertencias de falta de pruebas, de falta de enjundia, han seguido día tras día con sus diatribas.
Sé que no va a pasar, pero sería de justicia que El País sacara otras diez y tantas portadas pidiendo perdón a Camps y a sus lectores y, por aquí, unos cuantos posts del mismo cariz.
Un cordial saludo.
Lo considero un cadaver político. Sería una sorpresa otra cosa, ¿qué necesidad hay de rehabilitarlo? No creo que sea un peso pesado, o alguien con un tirón excesivo.
Dejo esto por escrito para comerme mis palabras cuando corresponda.
Vellana, dos acusados en el mismo caso estaban dispuestos a admitir su culpabilidad y el propio Camps estuvo a puntito de hacerlo. Qué poder de un periódico (por otro lado, cada vez peor) que es capaz de convencer a hombres inocentes de que admitan su culpabilidad.
Y si Camps llega al Consejo de Ministros, emigro.
Polkillas, dos acusados han reconocido el delito y sido condenados a sendas multas y el mismo Camps llegó a tener firmado el reconocimiento pero Ricardo Costa se negó a pasar por el aro.
¿El veredicto? La traslación a un juicio del mundo político valenciano.
Cualquiera que sea capaz de tragarse que el presidente de una Comunidad Autonoma, que lleva en cargos politicos desde los 29 años no tiene tarjeta de crédito, no puede hacer una transferencia y tiene que pedirle 200 euros a su escolta – y este los lleve en la cartera – no es que tenga tragaderas, es que tiene un bebedero de patos.
Es un veredicto descorazonador, pero no inesperado. Hace unos meses tambien absolvieron a un alcalde, el de Borriol (Castellón), porque había usado medios del Ayuntamiento para un pleito particular. Alegó que lo hacía como alcalde, pero tuvo el pequeño detalle de ponerse como beneficiario de la indemnización, un olvido sin importancia que se les pasó a los letrados del Ayuntamiento…. Volvieron a funcionar las tragaderas…como no dudo que vuelvan a funcionar en cada caso que se juzgue con jurado en la Comunidad Valenciana, asi los pillen cocinando un niño Jesús.
¿El jurado estaba compuesto por valencianos? Teniendo en cuenta que la mitad de los votantes de allí son peperos, ¿en un jurado en Valencia cuáles son las probabilidades de que allí te salgan 5 peperos que no están dispuestos a condenar al tipo al que habían votado?
De acuerdo contigo, Jorge. Camps ha sido absuelto, pero está políticamente muerto. En Génova es un infectado, aunque quizá más por el déficit que por los trajes. Además, esta sentencia es recurrible; y, en cualquier caso, aún hay un proceso en instrucción sobre la posible financiación ilegal del PP valenciano: ningún dirigente nacional del PP que tenga dos dedos de frente va a mover un dedo para ‘rehabilitar’ a Camps hasta ver cómo evolucionan estas dos cosas… y para cuando estas dos cosas evolucionen en alguna dirección, Camps estará ya enterrado, no sólo muerto.
Lo que no tengo tan claro es cuánto va a durar Fabra. Muy firme respaldo de Madrid va a necesitar para navegar estas aguas, porque no parece que le sobre el respaldo en el PPCV.