“En ocasiones se justifica la destrucción de empleo temporal culpando a la burbuja inmobiliaria. Se argumenta que los despidos se concentraron en la construcción y solo de forma colateral en los temporales, ya que estos son mayoría en aquel sector. Sin embargo, los datos contradicen esa explicación: la destrucción de empleo se concentró en los temporales de cualquier ocupación. Los empresarios han tendido a despedir empleados temporales tanto sin son artesanos o albañiles como si son operarios de planta, administrativos o profesionales intelectuales.”
La temporalidad laboral y sus perjuicios económicos y sociales ~ Kiko Llaneras.
El párrafo anterior corresponde al artículo que presenté al InnovaData, una iniciativa de CIBBVA y Civio para premiar reportajes inéditos basados en el periodismo de datos. El artículo competía en la categoría de contenidos y ha recibido el tercer premio.
El artículo describe brevemente el problema de la temporalidad laboral y sus perjuicios económicos y sociales. Algunos argumentos os sonarán, pero también incluye datos nuevos interesantes, sobre todo las cifras de despidos de temporales e indefinidos en distintas ocupaciones, donde se aprecia claramente que la dualidad no es solo cosa de turismo y construcción.
Podéis leer el artículo completo (pdf de tres páginas) y visitar la web del InnovaData para consultar el resto de trabajos premiados.
lo has hecho en latex y numbers, no?¿
Casi, en Numbers y Pages. No soy muy amigo de LaTeX. Me gusta mucho Pages.
Gracias por el artículo. Como bien refieres, las empresas españolas abusan del contrato temporal en todas las profesiones. Esto ha dado lugar a un mercado laboral dual, injusto y tremendamente desequilibrado: insider versus outsider. Se compensan todos los derechos del insider con la absoluta precariedad del outsider, que apenas disfruta de derechos laborales, pero en lo que a funciones y tareas se refiere, realiza las mismas que el insider. Hay empresas funcionando con un 70% de personal subcontratado y precario, que hace posible la marcha de las mismas, pero es invisible tanto a ojos del empresario como del propio personal estable. Este sector demuestra una total y absoluta indiferencia hacia la precaria y lamentable situación laboral de millones de temporales en España hasta que son despedidos y se encuentran con un mercado laboral que no tiene nada que ver con lo conocido. Ese mercado laboral precario está mayoritamente representado por los sectores más jóvenes de la población.