Internacional

Desigualdad, preferencias y velo de la ignorancia

6 Ago, 2012 - - @egocrata

Dan Ariely tiene un artículo fascinante en el Atlantic sobre las preferencias políticas de los americanos sobre desigualdad. Para empezar, Ariely pregunta a los encuestados que describan qué porcentaje de la riqueza nacional tiene cada grupo de población. A continuación, se les pregunta qué distribución les gustaría ver. El resultado es sorprendente:

Para empezar, los encuestados creen vivir en una sociedad muchísimo más igualitaria de la que realmente viven. Esto es relativamente  normal: las desigualdades en Estados Unidos han llegado a unos extremos tan colosales que es difícil acertar el número incluso si conoces las cifras por encima. El dato realmente sorprendente, sin embargo, es la tercera columna, las preferencias distributivas. Las cifras que describen los encuestados como ideales son mucho más igualitarias que lo que ven o la desigualdad real del país. Son tan igualitarias, sin ir más lejos, que el hipotético país salido de ellas sería más igualitario que Suecia. Los americanos viven en una sociedad increíblemente desigual, pero las preferencias políticas expresadas van en la dirección contraria, incluso entre votantes republicanos:

Incluso los conservadores americanos están proponiendo vivir en Suecia, cosa que ciertamente tiene mérito – especialmente cuando uno escucha a los políticos de su partido y las políticas públicas que reclaman.

La pregunta es, entonces, ¿Por qué Estados Unidos tiene tan poca redistribución comparada con las preferencias de los votantes? Ariely da varios motivos en el artículo, pero creo que se olvida del principal. Es cierto que en una situación de velo de la ignorancia (decidir opciones distributivas sin saber a priori sus efectos sobre tí) la mayoría tiende a pedir soluciones más igualitarias, pero creo que en este caso tenemos dos mecanismos bastante más sencillos. El primero, dudo que la mayoría de encuestados entiendan el concepto de «riqueza familiar» correctamente (casi todo el mundo lo confunde con ingresos). Segundo, y más importante, la ideología importa mucho más de lo que parece.

Dicho en pocas palabras: un votante republicano seguramente quiere más igualdad, pero si le piden una medida concreta para hacer el país más igualitario es muy probable que diga «bajar impuestos, reducir el déficit, eliminar regulaciones». Aunque los fines perseguidos no sean demasiado distintos a los que pide un votante demócrata, sus principios dictan que menos estado y más mercado es la solución. Cosa que no deja de ser verdad en ocasiones, por cierto, así que gracias a nuestra excelsa capacidad de escoger la información que más nos conviene no dudaremos en abrazar con entusiasmo.

En este caso, se supone, uno debería intentar convencer con argumentos racionales a un hipotético republicano que sus políticas públicas no funcionan, etcéteta, etcétera. A lo que te responderá «liberticida» y cosas parecidas, y estaremos de vuelta en la casilla de salida. El problema no es que los conservadores quieran algo malvado; el problema es que creen que sus medidas van a generar más oportunidades. El efecto es casi simétrico en la izquierda (especialmente en España, con la afición de cierta izquierda a proteger insiders por encima de todo), por cierto, así que nadie está a salvo.

En fin, un recordatorio (otro más) que uno debe fijarse en los fines y no los medios al hablar de políticas públicas.

 


25 comentarios

  1. Jorge dice:

    La estadistica me deja un poco frio. Habria que ver exactamente la pregunta de la encuesta, porque una cosa es que tu sociedad ideal sea igualitaria y otra es que estes dispuesto a acribillar a impuestos a los grupos mas ricos para conseguirlo.

    A mi me encantaria una sociedad totalmente igualitaria, pero se que eso es imposible (o peor que imposible), por el simple motivo de que cada persona es diferente.

    Tambien me gustaria una sociedad donde todos fueramos tan rapidos como Usain Bolt.

  2. Roger Senserrich dice:

    El artículo del Atlantic tiene enlaces a la encuesta. Más de 5.000 entrevistas, por cierto; es un buen estudio.

    Sobre el coste de redistribuir, repito lo de siempre: los impuestos no redistribuyen, lo hace el gasto. La presión fiscal, incluso en Suecia, es bastante proporcional a renta.

    Y oye, todos somos tan rápidos como Usain Bolt. Gracias a la tecnología conocida como «bicieta» o «coche» podemos correr mucho :-).

  3. Penny dice:

    Gracias, Roger, por la entrada y traernos el artículo,

    Teniendo en cuenta la hipótesis de velo de la ignorancia,lo más llamativo es porqué los encuestados no desean una distribución completamente igualitaria

    ¿Están suponiendo que la igualdad perfecta afecta a los incentivos al trabajo y la inversión y que la riqueza agregada se termina reduciendo?

    PD El blog de Ariely está chulo. Como ejemplo, una entrada sobre ética e ideología política http://danariely.com/2012/07/30/partisan-standards-of-ethics/

  4. Pau dice:

    Con esto podemos volver a la encuesta que ha citado Roger en otras ocasiones sobre lo que opinan los votantes del PP sobre el Estado del Bienestar: les parece estupendo.

    Mi conclusión es que el principal problema de la democracia es que la gente no sabe ni lo que vota…

    Y en este país tenemos una de las pruebas más recientes.

    • Undry dice:

      Creo que no es así. Les parece excelente lo que les afecta a ellos y fatal lo de los demás. O si no que alguien me explique lo del funcionario «liberal»

  5. Zhurrer dice:

    Muy muy interesante.

  6. José Jarauta dice:

    Interesante aunque poco novedoso. Parece apuntar a que casi todos están más o menos de acuerdo con esta reflexión:

    «…se deduce que la desigualdad, siendo casi nula en el estado de naturaleza, debe su fuerza y su acrecentamiento al desarrollo de nuestras facultades y a los progresos del espíritu humano y se hace al cabo legítima por la institución de la propiedad y de las leyes. Dedúcese también que la desigualdad moral, autorizada únicamente por el derecho positivo, es contraria al derecho natural siempre que no concuerda en igual proporción con la desigualdad física, distinción que determina de modo suficiente lo que se debe pensar a este respecto de la desigualdad que reina en todos los pueblos
    civilizados, pues va manifiestamente contra la ley de la naturaleza, de cualquier manera que se la defina, que un niño mande sobre un viejo, que un imbécil dirija a un hombre discreto y que un puñado de gentes rebose de cosas superfluas mientras la multitud hambrienta carece de lo necesario. »

    p 51.

    http://www.catedradh.unesco.unam.mx/SeminarioCETis/Documentos/Doc_basicos/5_biblioteca_virtual/2_genero/5.pdf

  7. Pedro dice:

    No entiendo la conclusión que sacas.
    Eso de que uno debe fijarse en los fines y no los medios al hablar de políticas públicas es precisamente lo que desmiente esta encuesta. Si, al final, las dos grandes vías que se usan para mejorar la sociedad tienen la misma finalidad teórica pero distintos fines reales (y esto tampoco es cierto,pero bueno..) eso nos indicará que hay un gran error conceptual, una manipulación flagrante del votante o una absoluta incomprensión de lo que se vota (como ha indicado Pau).

    Es absolutamente imposible que con las políticas que proponen los republicanos se llegue a una sociedad más igualitaria, absolutamente imposible. Otra cosa sería que una bajada de impuestos concentrada en ciertos sectores sociales más desavorecidos pudiese reducir la desigualdad (y estaría por ver), pero las propuestas de los republicanos que son absolutamente anti-progresivas no pueden conseguir eso en la vida.
    Las subidas de impuestos ciertamente también pueden fallar en ese fin (en España lo está haciendo, por cierto), pero en cualquier caso parece algo más intuitivo pues se supone que es el alimento de unas políticas de gasto público.

    Y yo tampoco creo que los conservadores quieran algo malvado, de hecho hay muchos más factores que el económico para elegir una opción conservadora, sobre todo el tiempps de bonanza. Pero el hecho es que alguien tiene que hacer ver a la población cual es la realidad de la distribución de renta y cuales son los efectos de determinadas políticas.

    Saludos,

  8. Zhurrer dice:

    Es curioso que uno de los mejores artículos de Senserrich en mucho tiempo, de esos a los que nos tenía antaño acostumbrados, sea de los que menos visitas tiene.

  9. Flor dice:

    Entonces y visto lo visto… sea del signo que sea el que nos gobierna, si no quiere el mal para la sociedad sino más igualdad y justicia social (fines) el problema es que no tiene ni pajolera idea (medios) de cómo conseguirlo? Si me lo creo tengo miedo, y si no me lo creo como que también.

  10. heathcliff dice:

    Uno debe fijarse en los fines y no en los medios al hacer cualquier cosa 😀

  11. Pablo Cáceres Maldonado dice:

    Es complicado lo de la encuesta. A los sociólogos les enseñan que deben tener cuidado con las preguntas sobre temas «socialmente sensibles» y con las «respuestas socialmente deseables». A lo que voy es que puede que al preguntar sobre ese tipo de cosas, estemos midiendo hipocresía en buena medida: decir que quieres que todos vivamos de forma similar, en un mundo muy igualitario, pienso que puede caer en esa categoría. Es similar a ir y preguntarle a la gente, en un momento donde el «discurso público» promueve el tema de la paridad de género, si está de acuerdo con la paridad de género. Se me hace que mucha gente se va a mostrar mucho más «paritaria» de lo que en el fondo es, para no quedar mal frente al encuestador.

    Asumir que lo que la gente dice sobre si mismas en las encuestas, sobre todo en temas que atañen a su moral y a sus intereses económicos, es efectivamente lo que la gente piensa y desea, es algo que siempre me tomo con mucha distancia.

    • MuGaR dice:

      Hay que habilitar un «me gsta» por aquí.

      Y además, si no fuesen hipócritas serían desinformados y/o ignorantes, lo que es una evidencia más de que la democracia no es el gobierno del pueblo, porque no puede serlo y la gente no está para historias xD

  12. Pablo Cáceres Maldonado dice:

    Por eso en lo personal no me gusta preguntar directamente la cosas de ese tipo, sino que prefiero construir indicadores. Una forma interesante de abordar el tema, es preguntarles por cosas que pueden ser consideradas «consecuencias necesarias», costos que hay que asumir para vivir en una sociedad más igualitaria. Se me hace que se por ahí se complican las cosas.

  13. Epicureo dice:

    Si yo hubiera hecho la encuesta, habría preguntado por la distribución de los ingresos y no de la riqueza, que es algo mucho más fácil de entender. De todas formas, incluso si los encuestados hubieran pensado en los ingresos, su distribución es mucho más igualitaria que la distribución de ingresos en USA.

    El resultado no es de extrañar. La gente está diciendo que preferiría un reparto que mejora la situación del 80 % de la gente. Y no proponen la igualdad absoluta porque saben que la gente necesita algún incentivo para esforzarse. Es totalmente lógico.

    Lo que puede sorprender es que en un régimen democrático la distribución real no sólo no se aproxima a la deseada, sino que cada vez es más diferente, más desigual.

    La sorpresa desaparece, claro está, cuando comprendes que en lo que se llama «democracia» la elección está limitada a elegir entre dos miembros del último quintil, que para tener opciones necesitan copiosos donativos de miembros del último quintil. Más o menos lo mismo que en Irán, donde también se vota y se puede elegir entre dos candidatos religiosos, uno un poquito menos fanático que el otro.

  14. Mexiliado dice:

    Iguales porque… ‘yolovalgo’. El que quiera igualdad no tiene más que aprovechar y montarse un paraíso comunista en el planeta rojo, cada vez más ‘accesible’.
    A mí, al menos, déjenme en paz: no me hace falta nadie que me diga que tengo que ser igual a él, ni nadie que me obligue -con su pervertida ideología- a repartir el fruto de mi esfuerzo con los que hacen de todo menos esforzarse, etc.
    La vida, guste o no guste a tanto igualitario, exige sobre todo que el individuo ponga de su parte para alcanzar sus metas; YO NO PAGO METAS DE NADIE.
    Saludos.

    • Francisco dice:

      Un poco más iguales porque lo decidimos entre todos.

      Es mucho más apropiado discutir las cosas, decidir que la igualdad es buena (aunque algunos en su derecho de opinar como usted querido Mexiliado se opongan) y poner unos cuantos impuestos, coberturas sociales y servicios como educación y sanidad.

      También podemos dejar la ley de la selva capitalista-liberal-mercado-libre y recurrentemente cuando la masa social se encabrone mucho ya que son más y muy brutos hacemos revoluciones a guillotina de los que han sido más eficaces para enriquecerse en el rico mercado.

      Yo creo que el reparto de la riqueza nos beneficia a todos.

      LLamame comunista, pero es que a mi lo que no me va es el derramamiento de sangre, que lo deja todo perdido.

      • MuGaR dice:

        Coincidimos por tanto en que la democracia no se impone por ningún motivo racional o porque la humanidad «caiga del caballo» y decida ser más «justa»?

        Interesante tb que, después de comprobar cómo se acercan las percepciones a la realidad, circule por ahí y se de carta de validez a un discurso político basado en las «sensibilidades» y la «respetabilidad de todas las opiniones»

      • Alexa dice:

        Se la dejas botando a los anticomunistas. Nada se ha demostrado más eficaz a la hora de derramar sangre que las veleidades igualitarias.

        • Epicureo dice:

          Exceptuando las veleidades religiosas, las veleidades nacionalistas, las veleidades racistas, y sobre todo la veleidad de ganar dinero aunque tengas que exterminar o esclavizar a unas cuantas tribus de otro color… Se ha matado por el igualitarismo, cierto, pero menos que por cualquiera de las anteriores.

          • Alexa dice:

            No. Las utopías igualitarias, en cuestión de cifras asesinas, copan el ránking.

            Y aun así, mientras que nadie en su sano juicio defiende hoy proyectos de esclavitud o exterminio de ‘tribus de otro color’, algunos (aunque cada vez menos, afortunadamente) no tienen empacho en pregonar su filiación comunista.

    • Epicureo dice:

      Amigo mexiliado;

      Si usted se ha hecho millonario trabajando y sudando 200 horas al día, tiene cierta razón en lo que dice, aunque es una ingenuidad pensar que todos los millonarios son así.

      Si se ha hecho millonario porque es usted inteligente, ha tenido acceso a una educación y un medio social adecuado, y eso le ha permitido apoderarse (legalmente por supuesto) del dinero de los que son más ignorantes, más torpes o peor conectados, también comprendo que diga esas cosas, por autodefensa.

      Si usted no es millonario, lo siento, pero es un tonto útil.

      En cualquiera de los casos se equivoca al pensar que la redistribución consiste en robar a los ricos para dárselo a los pobres. Los ricos (y sobre todo las clases medias) también se benefician de ello. Vivir en un país donde hay paz social, una población culta y sana, buenas infraestructuras, seguridad y justicia, tiene un valor enorme, seguramente más que lo que podría comprar con el dinero de sus impuestos en un país incivilizado donde rige la ley de la selva.

  15. Navarta dice:

    Eso de que sólo los fines son importantes sin tener en cuenta los medios, me lleva a recordar ciertos argumentos comunes de la propaganda comunista/cristina/musulmana/hebrea, etc.
    Vivir el valle de lágrimas para alcanzar el paraiso socialista/cristino/musulmán/hebreo o de los gnomos de Zurich.

    • MuGaR dice:

      Pues tp hay que exagerar, recordemos a little boy y lo bien que cumplió su finalidad. La justificación es siempre a posteriori, no se engañen.

  16. Belen dice:

    Me ha parecido muy interesante el artículo. ¿Sabéis algo sobre las preferencias de los españoles?

Comments are closed.