Es fácil hablar de problemas cuando se habla de Estados Unidos. El país tiene un sistema de gobierno profundamente disfuncional, instituciones anticuadas, infraestructura que se cae a pedazos, políticos nihilistas y divisiones sociales profundas, así como una larga lista de conflictos mal resueltos y desastres potenciales aparcados sin arreglar. Hay días que realmente parece mentira que esta nación gigantesca sea capaz de hacer nada relevante, y eso es cuando no se dedican a sabotear activamente algún tema esencial.

Pero aun con todas estos problemas, enormes desigualdades y tendencias suicidas de su clase política, la economía de Estados Unidos parece estar saliendo, poco a poco, del enorme agujero en el que se había metido, saliendo de la gran recesión con mucha más fuerza y energía que la eurozona. Las empresas del país siguen siendo enormemente competitivas, con una capacidad de crear riqueza gigantesca. Toda innovación tecnológica, todo sector puntero que aparece en el horizonte tiene emprendedores americanos marcando el ritmo. Producen premios Nóbel a patadas, atraen talento como nadie y explotan ideas mejor que nadie. A pesar de los pesares, Estados Unidos sigue siendo un país inmesamente rico, con un nivel de renta por cápita (desigualdades aparte) que deja en ridículo a cualquier otro país desarrollado.

La pregunta obvia a estas alturas, y más viendo la lenta, persistente implosión de la eurozona, es ¿cómo lo hacen? ¿Qué tiene Estados Unidos que a pesar de ser un país tan singularmente mal gobernado a veces, siga teniendo una economía tan fuerte? La respuesta es complicada, y desde luego no es algo que se pueda cubrir en un sólo artículo, pero tiene mucho que ver con las bases estructurales de la economía del país. El gobierno americano no es que haga demasiadas cosas bien, pero lo esencial, lo que realmente sienta las bases de la fortaleza económica del país, lo tienen bastante claro. Veamos:

1. Un mercado interior enorme:

Es una obviedad, pero el tamaño importa. Estados Unidos es un país enorme de más de 300 millones de habitantes. Cualquier empresa que quiera dar servicio a todos ellos tiene que ser grande, y eso genera, casi inevitablemente, economías de escala tremendas.

Lo que es un poco menos obvio, pero igualmente importante, es que el sistema regulatorio americano favorece y mucho la expansión de las empresas. Un poco por diseño, un poco por adaptación ingeniosa, la commerce clause de la constitución ha sido interpretada como una licencia para que el gobierno federal haga todo lo posible para eliminar regulaciones estatales que pongan trabas a la entrada de nuevas empresas. Aunque esto en ocasiones ha creado algún problema secundario (bancos buscando el estado que menos control regulatorio tenga, ya que si están autorizados a operar en un sitio pueden hacerlo en todo el país), Estados Unidos tiene una ventaja enorme en este aspecto. Es un mercado grande, unificado y fácil de manejar. Para una empresa buscando crecer, es una joya.

2. Reguladores lentos, torpes y que llegan tarde:

El sistema legislativo americano es, no hace falta decirlo, singularmente ineficiente. Dos cámaras, presidente con poder de veto, toneladas de actores con veto y una incapacidad total y absoluta para hacer nada con rapidez. Esto puede ser fuente de problemas en algunos casos (véase todo el sistema de salud americano), pero es una ventaja importante cuando algún avance tecnológico crea un mercado nuevo.

¿Por qué? Recordad los primeros tiempos de internet, esos días en que nadie tenía puñetera idea sobre qué estaban haciendo. El Congreso de los Estados Unidos perdió cantidades ingentes de tiempo discutiendo cómo regular la pornografía en la red, violencia en los videojuegos y demás temas vitales para la supervivencia de la especie, pero fueron incapaces de aprobar ninguna ley coherente  regulando el sector. Cuando lo hicieron (con la DMCA) la revolución ya había pasado de largo, y se limitaron a aprobar una ley que hasta cierto punto refrendaba el status quo. Mientras tanto, en España tuvimos varias leyes torponas, un intento de revolución desde arriba con ese engendro llamado infovía y toneladas de molonismo 2.0 de la clase política que se ha quedado en casi nada.

Cuando en Estados Unidos hay una revolución tecnológica, los políticos dejan hacer, y sólo regulan cuando el humo ya se ha disipado. En Europa, demasiado a menudo, los gobiernos empiezan a sacar leyes a destajo antes que nadie descubra cómo hacer que todo esos inventos sean útiles.

3. Flexibilidad:

Una de las cosas más sorprendentes de la legislación americana es cómo estatutos muy antiguos son aún vigentes regulando sectores nuevos. La ley antimonopolio de Estados Unidos es todavía hoy la Sherman Antitrust Act de 1890 (!!!), al fin y al cabo; cuando escriben una ley para regular algo, lo hacen pensando a largo plazo, dejándola abierta a desarrollos futuros. Esto es en parte por resignación cristiana (aprobar leyes es tan difícil que siempre acaban siendo ambiguas), en parte por diseño consciente, en parte para sacar partido de un sistema judicial fuerte y bien equipado para aplicar leyes complejas de forma creativa, pero el resultado es decente.

Si a esto le sumamos el aprecio de los legisladores para crear reguladores independientes en temas técnicos (el Congreso no tiene ni idea de medio ambiente, pero la EPA sí), da como resultado leyes más abiertas que en otros países europeos. No siempre funciona bien, pero tiende a evitar regulaciones pesadas. Y sí, esto incluye el mercado laboral. Pero ese es otro tema.

4. Un buen reparto competencial:

Tras más de doscientos años de desarrollo constitucional, el sistema federal americano tiene un buen reparto de competencias. El gobierno federal se encarga de defensa, pensiones, banco central, la parte básica de sanidad y desempleo y redistribución entre territorios, y tiene una serie de impuestos para ello. Los estados hacen el resto, y recaudan lo que necesitan para que pagarlo. El arreglo permite compensar desajustes de balanza de pagos, crisis financieras y demás desastres que afectan al euro de forma eficaz, coloca la palanca fiscal en manos de quien tiene la imprenta (algo nada trivial estos días, como hemos visto) y deja a los estados amplio margen para experimentar y competir entre ellos.

¿Es un sistema perfecto? No, ni de broma. Es una locura que la educación esté en manos de los ayuntamientos en muchos casos (aunque varía mucho de estado a estado), sin ir más lejos. Pero desde el punto de vista de estabilidad macroeconómica y seguridad jurídica, es un buen sistema.

5. Administración pública modestamente competente:

Especialmente el sistema judicial (civil, no criminal. Ese es un desastre), burocracia y papeleo regulatorio y demás cosas básicas. Los impuestos son un desastre, pero ese es otro tema.

6. Las mejores universidades del mundo:

Parece fácil, no lo es. No sólo tienen las mejores, sino que además todo lo de arriba contribuye a que todo lo que descubren pueda ser implementado y comercializado rápido.

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¿Es un sistema perfecto? Por supuesto que no. No voy a insistir en las atroces desigualdades de renta, escasa movilidad social y demás. Pero la estructura básica de la economía americana, los cimientos institucionales sobre los que se asienta el sistema, es extraordinariamente sólido y eficaz.

Si os fijais, no hay nada estrictamente «de derechas»; nada relacionado con redistribución (o ausencia de esta), derechos sociales, gasto público o recaudación fiscal. Muchas de las virtudes descritas arriba son replicadas en los sospechosos socialdemócratas habituales (con la excepción de tamaño, que compensan con economías muy abiertas al exterior), y serían un excelente punto de partida para reformas estructurales serias tanto en España como en la Unión Europea.

Pero de eso hablamos otro día, que hay mucho que contar.


15 comentarios

  1. Pululante dice:

    Parece que muchas pistas apuntan a que el Gobierno se mete poco en los asuntos de la gente y la economía. Pareciera que mejor poco gobierno que mal gobierno.
    Aunque haya cosas que le chirríen a un socialdemócrata (redistribución, igualdad) diría que es una o la otra ya que estos «logros» exigen un gobierno más intervencionista a lo nórdico (que son excepción más que norma).

    Una pregunta: ¿Cuánto maneja el Estado en EE.UU. en función del PIB? En Europa anda alrededor del 50%, según creo.

  2. […] "CRITEO-300×250", 300, 250); 1 meneos ¿Qué hace bien Estados Unidos? politikon.es/materiasgrises/2012/01/10/%C2%BFque-hace-bie…  por greboada hace […]

  3. Montressor dice:

    Realmente, sobre el punto de la flexibilidad y la vocación de permanencia de ciertas leyes americanas, diría yo que en España, hasta épocas recientes, se ha mantenido también esa dinámica: el Código civil, reformado una y mil veces, es de 1889; la Ley de Enjuiciamiento criminal data de 1882, aunque probablemente tenga los días contados. Y como paradigma de esta tendencia en Europa, el Código civil francés (Código de Napoleón) fue aprobado en 1804.

  4. Roger Senserrich dice:

    Pululante: lee la conclusión. Los países socialdemócratas clásicos tienen mucho en común con USA. El problema son los sistemas de bienestar continentales conservadores, no los socialdemócratas.

    EUA maneja sobre un 30-35% del PIB. Europa se mueve entre un 40 y un 50% (Francia).

  5. Manu Oquendo dice:

    Buenas noches:

    He vivido allí unos cuantos años y es un país y una gente que me encanta. Especialmente en la región donde vivía: Nueva Inglaterra.

    Desde Europa continental, tan jacobina y con resabios hegelianos profundos, creo que no somos capaces de hacernos una idea cabal de América. Aquí en muchos casos se promueve una imagen distorsionada de USA, de sus ciudadanos y de sus élites. Mucho de ello es ignorancia o envidia.

    La pregunta no es sencilla porque USA tiene muy graves problemas que creo no será capaz de resolver, pero esta crisis debiera servir para que los europeos dejemos de creernos el ombligo del mundo por si acaso nos queda tiempo antes de que Europa se convierta, por imperativo biológico, en Eurabia.

    Hay varias cosas que los ciudadanos europeos no perciben bien.

    1. La fiscalidad promedio europea es un 30% superior a la de USA (también a la de Japón)
    2. El problema no es que nosotros tengamos más servicios si no que Nuestros Sectores públicos son inmensamente mayores (tenemos en España los mismos empleados públicos que Japón que más que nos dobla la población).
    3. Lo anterior quiere decir que salvo nichos muy especiales (Mecánica y química alemana esencialmente) no somos en absoluto competitivos. Olvidamos que el Estado también es un coste de Producto. Es decir uno puede vivir fabricando y vendiendo botijos. Pero si sus botijos tienen que pagar 18 parlamentos no venderá ni uno. Esto no se quiere entender. Por contra la legislatura de Texas sólo se reúne 6 meses cada dos años. El resto tienen que ganarse la vida privadamente como todo el mundo.
    4. Tanto en USA como en Japón el trabajo voluntario y la caridad privada son de enormes dimensiones.
    Por ejemplo: Año 2008 caridad privada oficial 48,000 millones de dólares. O el hecho de que cada día 90 millones de americanos trabajan al menos tres horas para su sociedad. Desde atender la biblioteca del pueblo a, si eres cirujano, operar gratis en el hospital privado donde trabajas. No somos capaces de imaginar lo que esto supone de fortaleza social.
    5. USA se tiene por una nación, están orgullosos de ello, en general, planifican estratégicamente de modo global, mantienen un gigantesco despliegue militar a pesar que desde Corea han perdido todas las guerras.
    6. La fortaleza militar les permite ofrecer seguridad y financiarse globalmente a menos del 2% mientras que sus inversiones extranjeras les generan en torno al 3.5% en media. Es decir, su gigantesco déficit les resulta rentable y mantienen un entorno acogedor (con impuestos pero nada que ver con la extorsión europea) para los capitales globales.

    El problema más grave es el nuestro, el europeo. Queremos ser lo que no somos y eso siempre sale mal.
    Estoy seguro de que para la mayoría de los europeos (UK, Italia, España, Irlanda, Holanda, Suecia, Polonia, Hungría con certeza) nos es más natural trasladarnos a América y sentirnos parte de ella, incluso por lazos familiares, que hacerlo en Francia o en Alemania por poner dos países que también me gustan y respeto.
    Bueno que esto da para un libro muy gordo.
    Saludos

  6. polkillas dice:

    «Tanto en USA como en Japón el trabajo voluntario y la caridad privada son de enormes dimensiones.
    Por ejemplo: Año 2008 caridad privada oficial 48,000 millones de dólares. O el hecho de que cada día 90 millones de americanos trabajan al menos tres horas para su sociedad. Desde atender la biblioteca del pueblo a, si eres cirujano, operar gratis en el hospital privado donde trabajas. No somos capaces de imaginar lo que esto supone de fortaleza social.»
    ¿Cuál es la diferencia entre el trabajo social gratuito y financiar estos servicios vía impuestos? Que los impuestos son más justos, porque los egoístas no sacan ventaja (a no ser que incumplan la ley).
    Que un 30% de la población trabaje gratis (3 horas al día es un «minijob») es una fortaleza, pero recaudar impuestos es una «extorsión». No sé, yo no lo veo.

  7. Maese Alcofribas dice:

    Hace poco, en una respuesta a un comentario mío, Kantor calificó el sistema sanitario de EEUU como “fantasía neo-victoriana”. Me pareció un ejercicio insuperable de síntesis descriptiva y elegancia cómica

    Yo tengo muy poco sentido patriótico, no sé si será por provincianismo o por la respuesta condicionada izquierdista que asocia patriotismo con fascismo, comprensible tras 40 años de placidez franquista. Pero el caso es que una de las pocas cosas que despierta mi patriotismo es nuestro sistema de sanidad pública. Se trata de una obra colectiva impresionante, lograda con poco más de un 6% de lo que producimos. Uno de los cinco o seis mejores sistemas públicos del mundo, un mundo que tiene cerca de 200 estados. Creo que está justificado sentirse orgulloso. No se trata de un orgullo acrítico, y es cierto que el sistema sanitario tiene muchos problemas, cómo iba a ser de otra forma en un sistema de tan alta complejidad, y más en los tiempos que corren.

    Es la eterna cuestión del vaso medio lleno o vacío. Considero que es importante, muy importante, no perder de vista que el vaso está medio lleno, sin que esto lleve a la autocomplacencia o a la falta de autocrítica. Pero estoy cansado de autoflagelaciones. Le sugiero a Manu Oquendo que se vuelva a EEUU y se quede allí para siempre, disfrutando de ese 10-15% menos de peso estatal (¡¡¡un 10-15% menos!!!), a salvo del jacobinismo, los resabios hegelianos, la extorsión fiscal y la inminente islamización de Europa (esta sí que es una visión cabal y no distorsionada). Donde prevalece la caridad privada, esto es, neo-victoriana, y no la solidaridad impuesta comunista. Donde se puede exhibir músculo militar y gastar tropecientos mil millones de dólares en invadir países (en ese ámbito, supongo, sí que mola el despilfarro, perdón, el gasto público).

    Yo, tras pensarlo mucho (lo cual no implica ni excluye pensarlo bien), creo que las advocaciones abstractas a la libertad están obligadas a legitimar la violencia. No concibo como puede alguien ser libre mientras no se le permite ser violento. La afirmación “mi libertad termina donde empieza la de los de más” me resulta tan ridícula, de una endeblez argumental tan evidente, que me causa vergüenza ajena, al ser obvio que la formuló aquél que quería imponer una idea de libertad ajustada a sus deseos y sus miedos. El estado nos coacciona al no dejarnos ejercer la violencia. Seguro que esta coacción sí que le mola a Manu Oquendo, porque se ajusta a sus deseos y sus miedos. En eso al menos estamos de acuerdo, a mí también me mola esa coacción. Coaccióname, Daddy.

  8. Kantor dice:

    «Pero el caso es que una de las pocas cosas que despierta mi patriotismo es nuestro sistema de sanidad pública. Se trata de una obra colectiva impresionante, lograda con poco más de un 6% de lo que producimos. Uno de los cinco o seis mejores sistemas públicos del mundo,»

    Este es un tema esencial. Resulta que en España siempre hemos tenido un Estado cojonudo (desde el Imperio, y antes con los Reyes Católicos) y hacemos muy bien lo que debe hacer el Estado. Pero lo que debe hacer el Estado es relativamente poco. O sea que hacemos muy bien relativamente poco.

    Y si, la Sanidad la debe hacer (al menos pagar en buena parte) el Estado, pero al final del dia si solo hacemos eso bien (y vamos en esa linea), como eso lo tiene que pagar todo lo demás, pronto dejaremos de hacer bien incluso eso.

    La penosa sanidad USA es algo bastante malo, claro, pero también es un buen sintoma. Es un síntoma de liberalismo, que es la mejor ideologia. Como la gente parece condenada a tener una, mejor esa que las demás.

  9. Maese Alcofribas dice:

    Kantor, no quiero negar la realidad de nuestros problemas. Por otra parte soy un tío muy austero y muy partidario de la meritocracia, y en este sentido reconozco que hay cosas en nuestro país que son para echarse a llorar. Pero es que como siga leyendo a determinados articulistas y comentaristas de la blogosfera, de verdad voy a creer que vivimos en Sierra Leona. No puedo con esa actitud de “todos los españoles menos yo son unos inútiles y unos parásitos”

    Creo que es decir demasiado que la gente “esté condenada a tener una ideología”. Pienso que lo que hay en la cabeza de la gente, básicamente, es (natural) ignorancia de la complejidad y el (natural) deseo de evitar el sufrimiento físico y psicológico. Aquí, en Pekín y en USA. Entiendo los obvios peligros de esa actitud de “quiero servicios pero que los pague otro”. Pero me da miedo este zeitgeist (¿real o profecía autocumplida de mi miedo?) de “estamos así por culpa de la socialdemocracia, así que páguese usted como pueda ese implante de cadera”. Es falso e injusto

    También confío en que si se explican las cosas con respeto (que es más, mucho más, que la ausencia de insulto) y honestidad (que implica el reconocimiento explícito de que nos movemos en un gran nivel de incertidumbre, de que no disponemos de una ciencia que nos garantice la efectividad deseada de nuestras acciones políticas), la gente lo entenderá. Una enorme mayoría de la gente es honrada, trabajadora y reniega del parasitismo

  10. Maese Alcofribas dice:

    quiero aclarar que mi comentario no iba por el post de Roger, que hasta donde llego me parece muy sensato

  11. Kantor dice:

    Es verdad que no disponemos de una ciencia que nos garantice la efectividad de nuestras acciones políticas. Pero ese argumento no aporta ni quita gran cosa a niguna política. No sabemos si nos invita a aumentar la sanidad publica o a reducirla. No sabemos si invita a aumentar la protección del trabajador o reducirla.

    Al final sin relaciones de causalidad conocidas no hay política posible. Todos los discursos políticos incluyen explicitamente o implícitamente opiniones sobre la elasticidad precio de ciertos bienes (clásicamente el trabajo) sobre los costes relativos entre la provisión de bienes públicos y el coste social de la tributación, y sobre la eficiencia relativa de la provisión social y privada de ciertos bienes.

    Siempre hay una Teoria Economica debajo de todo discurso politico, y quienes critican a la economía ortodoxa lo hacen en nombre de otras teorías económicas, porque al final la política a es siempre hacer unas cosas para lograr otras, y toda política depende de que montones de afirmaciones positivas sean factualmente ciertas.

    No hay escapatoria de la economía en política. Reconocer los limites de la economia Es reconocer los limites de la política racional.

  12. Maese Alcofribas dice:

    “No hay escapatoria de la economía en política. Reconocer los limites de la economia Es reconocer los limites de la política racional.”

    No me estaba rebelando contra esa realidad impepinable. Digo que debería comunicarse a la gente de forma más explícita donde están los límites de la política racional. No intento protegerme en el nihilismo científico. Frases como: “a Rajoy no se le puede adelantar más por la izquierda” son impropias de un científico, tal y como yo lo entiendo

  13. Alvaro dice:

    Iba a poner algo muy parecido al primer post de Kantor.

    En España repetimos como un mantra lo de nuestra estupenda sanidad publica. Ok, de acuerdo, es estupenda y la de EEUU una mierda y por eso podemos sentirnos orgullosos como pais……¿tenemos algo mas con lo que sentirnos «patriotas»?.

    Por que da la sensacion que si la socialdemocracia europea (y concretamente la española) sigue repitiendo ese mantra y no preocupandose por NADA mas, lo unico que vamos a conseguir es ser un pais en el que se muere muy bien atendido.

  14. Maese Alcofribas dice:

    “¿tenemos algo mas con lo que sentirnos “patriotas”?”

    Umm… la verdad es que solo se me ocurre a Andrés Iniesta flotando sobre el césped, y una lista de nombres que empieza por Elsa… y el jamón, claro

    Y esnifando polvo y tragando priba tumbamos al que se nos ponga por delante…

    ya en serio, dicen que con esta crisis hemos aprendido la importancia real de factores subjetivos como la confianza… quizás sea también importante no autoflagelarse…o peor, flagelar al país excluyéndose uno mismo y los “suyos”… como ese ex-presidente que iba por el mundo diciendo que su país era una mierda desde que no lo gobernaba él…

    más allá de la sanidad, según los datos que da la Wiki, estamos el 23 del mundo en el Indice de Desarrollo Humano (Finlandia está en el 22, Dinamarca en el 16), en el grupo de muy alto IDH. En 1980, la diferencias con Australia y EEUU (en ese momento los dos primeros) era de -0.159 y -0.146, en 2011 es de -0.051 y -0.032

    insisto en que no pretendo minimizar los problemas, pero es que leo “extorsión fiscal” y “Eurabia” y se me disparan las respuestas condicionadas

    un saludo

  15. israel pozos dice:

    Un post ejemplar para reflexionar HOY que vemos un USA en quiebra, de personas buenas y muy trabajadoras…pero con un gobierno malisimo y unas leyes anacrononicas y parchadas casi todas las importantes vigentes antes de que existiera la internet lo que en si trae problemas, una burocracia repetida para cosas relevantes como la vivienda, que la hace «imposible » para una poblacion de 300 millones ..pero con mas de 60 millones de drogadictos , con mas de 50 millones de pobres y sin trabajo aunque las estadisticas maquilladas digan otra cosa un pais de contrastes donde hay 20 millones de multimillonarios y adonde desde siempre los banqueros los han gozado a todos y los siguen vacilando porque el 90% de la poblacion debe la casa, el auto, la ropa, la educacion de los hijos y la comida cotidiana, y donde los empresarios deben todo : la maquinaria y todo su desarrollo, y donde los tres niveles de gobierno deben la infraestructura de la nacion completa, un pais donde poner a trabajar la maquinita de hacer dolares le «salva» de sus deudas a los ojos foraneos …pero por algo quitaron al ex director del FMI, por decir que USA no debiera ser atraves del US Dollar el referente monetario internacional y los banqueros lo ejecutaron y lo encarcelaron con el mito de la sirvienta prosti, El dia de hoy 13 de enero 2012 Obama ha dicho al congreso que deben actualizarse las leyes para salir un poco de esta crisis depredadora , por algo sera…salu2

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