Por el Washington Post entrevistan a un economista (historiador económico, para ser más preciso) que he citado por aquí unas cuantas veces, Barry Eichengreen – y como siempre, dice cosas más que interesantes.
Lo más importante, de lejos, es la definición de la crisis. Como he mencionado alguna vez, la eurozona no es una crisis de deuda, sino que es una crisis bancaria. El problema no es que Grecia no pueda pagar sus deudas (eso es un problema para los griegos, pero no para el resto del continente), sino el hecho que una suspensión de pagos probablemente llevaría varios bancos fuera de Grecia a la insolvencia. El momento Lehman no vendría por la misería de un 3% escaso de la población del continente, sino por el colapso de varias entidades financieras que se comerían las pérdidas.
Las cifras son de hecho comparables. Una quita del 50% en deuda pública griega colocaría unos 150.000 millones de dólares en pérdidas en el sistema bancario europeo, una cifra similar a los 155.000 millones de deuda de Lehman el 2008. Como en la última crisis, la bancarrota haría que toda una categoría de activos (CDOs con hipotecas el 2008, deuda pública de la Europa periférica ahora) pasaran a ser temidos como la peste. Y como sucedió entonces, las pérdidas distribuidas por todo el sistema y la potencial basura tóxica flotante provocarían un cortocircuito que dejaría a muchos bancos sin financiación, abriendo paso a más bancarrotas y pérdidas.
Lo que sabemos ahora, tras el desastre de Lehman, es que no podemos tener bancarrotas incontroladas. Cuando una entidad lo suficiente grande como para producir pérdidas importantes y convertir activos dudosos en basura se hunde, todo el mundo que ha tenido alguna relación con ellos pasa a ser un apestado. La prioridad número uno de la Unión Europea, ahora mismo, es montar un sistema para que si hay quiebra, todo el mundo esté seguro que el resto del mundo sigue igual, y nadie se quedará sin cobrar. O, dicho en otras palabras, en vez de darle 150.000 millones de euros a Grecia directamente vamos a prometer que estamos a dispuestos a gastar hasta dos billones en promesas / nacionalizaciones para garantizar el resto del sistema financiero.
El «dispuestos a gastar», por cierto, es importante: los gobiernos europeos, a buen seguro, no van a perder esa cantidad de dinero. En vista de la experiencia del gobierno americano en el 2008 , es posible que incluso ganen dinero con este rescate. Las pérdidas de los bancos en deuda griega son reales, pero el (previsible) pánico hará que las inyecciones de capital (nacionalizaciones, dicho en fisno) les den un montón de acciones por cuatro duros. Dar dinero a los griegos sería probablemente más caro a medio plazo, especialmente en vista de la capacidad de autogobierno que han demostrado.
Lo curioso de la entrevista, sin embargo, es un detalle importante: si la crisis de la eurozona es una crisis bancaria, y no fiscal, lo que necesitamos a largo plazo es una «unión bancaria», no un supergobierno económico en Bruselas. Aunque personalmente la idea de los Estados Unidos de Europa me parece muy atractiva, si es cierto que esta crisis podría haberse evitado sin tener un Departamento del Tesoro europeo. Eichengreen señala que un regulador bancario europeo (al estilo de la Reserva Federal) con un mecanismo financiero para rescatar países / bancos (nótese que viene a ser lo mismo; estás rescatando a los dos) con problemas de solvencia puede bastar para hacer el euro viable a largo plazo, siempre y cuando los países miembros tengan una política fiscal racional y estabilidad presupuestaria bien vigilada.
Aunque no me acabo de creer del todo que Grecia o Italia van a hacer algo tan prosaico como no endeudarse porque eso es lo que dice su constitución (los contables creativos están para eso, ¿no?), lo cierto es que esta crisis, sólo con los dos primeros elementos, hubiera sido mucho menos grave. Primero, ningún banco francés hubiera prestado tanto dinero a Grecia (si el regulador bancario es competente – algo complicado, pero posible si las normas son lo suficiente simples y clara), así que no estaríamos temiendo por su vida. Y segundo, en caso de petardazo, el gobierno de Francia no hubiera tenido que rescatar a nadie ellos solitos, sino que un fondo europeo común hubiera amortiguado el golpe. Sí, Grecia podría haberse endeudado en el exterior (los tontos de Bank of America seguro que les daban un préstamo), pero esto de cargarte un banco fuera de la eurozona es casi divertido, según se mire.
Si os fijais, es algo parecido al fondo de garantía europeo que pedían por NeG no hace mucho, y que otros economistas han mencionado alguna vez. Podría funcionar, de hecho, y tengo la sensación que políticamente no es imposible de vender, especialmente si se financia poniéndoles un impuesto a los bancos como ya se hace ahora al garantizar depósitos.
Por descontado, esta no es una solución perfecta. Primero, porque no estoy seguro que nadie por allá arriba con un cargo electo acabe de entender este plan. Hay días que esta crisis parece una especie de batalla entre tecnócratas por medio mundo lanzando ideas como posesos y políticos trabajando a destajo para encontrar excusas para ignorarlas. Segundo, y más importante, esta solución sólo arregla la mitad del problema, el lado financiero. Como dice Martin Wolf, los desiquilibrios en las balanzas de pagos dentro de la eurozona seguirán ahí, y no se solucionarán sin inflación en el norte y reformas estructurales agresivas en la periferia. Y eso en España me cuesta imaginarlo, pero en Italia no lo veo.
En fin, queda mucho por hacer. Demasiado.
Insisto, el pelotazo griego hace meses que se ve venir, y si el diseño del sistema desincentiva que los bancos hagan provisiones en un caso tan obvio como éste, es que hay que rediseñar el sistema de arriba abajo. Ningún banco debería tener que quebrar por Grecia, y menos todos esos que anuncian beneficios multimillonarios cada trimestre.
Seamos realistas, a nadie le interesa que Grecia salga del euro. Si saliera, sería mucho peor para los griegos, al menos si mira hacia Europa para resolver sus problemas.
Obviemos las muy dolorosas consecuencias financieras para Grecia a corto plazo. Se dice, incluido este señor, que a medio-largo plazo, a Grecia le beneficiaría la vuelta al Drachma porque ganaría competitividad…¿para exportar a dónde?. ¿Qué exportaría Grecia?¿Más aceite barato, más turismo?¿Sería suficiente para que Grecia recuperar el bienestar perdido, el PIB perdido?. Y ahora se dice que no, que evidentemente Grecia tendría que hacer reformas estructurales y que tendría que recibir inversiones del exterior, por parte de la UE, se entiende, mayormente. ¿Quién le prestaría el dinero a los griegos para acometer sus reformes estructurales?. Y ahora la segunda cuestión: la inversión extranjera directa en Grecia, ¿de qué países europeos?¿Permitir que Grecia exporte paro, ¡más!, a la UE por medio de la deslocalización de fábricas europeas a Grecia?¿Qué países europeos permitirán eso, qué poblaciones que saben ya perfectamente que uno de las causas de la crisis es que la UE ha perdido base industrial que ha sido substituida por sector financiero y deuda para todos?. Esta tesitura es incluso válida si Grecia no sale del euro. Yo simplemente no me creo que ahora que ya se han perdido millones de empleos y se siguen perdiendo miles en toda Europa, vaya a haber un solo país que consienta más deslocalizaciones, por salvar a un país que se ha metido él solito en la ciénaga (como todos los demás) por sus pésimos gestores públicos y su corrupción.
Grecia será troceada y vendida, a los europeos, a los chinos, árabes e indios. Y todo país que acabe como Grecia, seguirá el mismo camino: ser vendida a los acreedores. A ver si así aprendemos las lecciones de economía sobre la deuda y sus reglas.
tengo una duda, los accionistas de los bancos no estaran por la labor de que los estados entren en el accionariado porque se diluiria su participacion en los dividendos.
Hasta que no vean la ruina mas absoluta no aceptaran la intervencion directa.
Como ya se ha dicho en este blog antes, grecia requiere la intervencion de un equipo de tecnocratas de la ue ya. Es la unica forma de recuperar la «confianza»
A ver si he entendido bien, en vez de darles la pasta a los griegos para que deban menos, se mete en los bancos para nacionalizarlos (tipo a lo de la CAM). Así los griegos siguen debiendo igual (y psicológicamente se quedan hundidos en la miseria). ¡Os dije que os dejárais de experimentos financieros 2.0!. Lo que hace falta es que Grecia (y los demás países) funcione y funcione bien y para eso lo que necesita es CONTROL , pero también CONFIANZA y UNIÓN
T’enllaço una entrevista que l’altre dia va sortir per la tv que és el que finalment la gent pensem.Algunos se están forrando.Al fb
Almaric:
Cuando nacionalizas un banco no pides permiso a sus accionistas. Un estado puede entrar a saco, como Dios manda.
Manuel:
Sólo intervenimos a los bancos para amortiguar los efectos de una bancarrota griega. En el escenario de arriba, Grecia está dejando de pagar.
Tito: Pero aun dejando de pagar ¿siguen debiendo el dinero no?
No sé como funciona eso , pero yo dejo de pagar la hipoteca y me lo quitan todo y aun así me dejan la PUA una vez liquidado todo al precio que ellos DIGAN…
Cuestión para politólogos y economistas con ganas de escribir:
El otro día me planteé esta cuestión, que no sé responder: Si se hubiera aprobado la malograda «Constitución Europea» (recordemos, la que fue rechazada en referendum por los franceses entre otros), nuestra situación, la de los europeos o la de Europa como entidad, ¿sería peor, mejor o hubiera sido indiferente?.
Un saludo.
[…] Salvando la eurozona sin unión fiscal […]
[…] El problema es que Alemania no quiere que el BCE intervenga. El Banco Central Europeo, de hecho, lo tiene “prohibido” (es un decir – tiene mucha autonomía), y los alemanes temen como la peste que una intervención así provoque inflación y cree un precedente peligroso que convierta la eurozona en una república bananera a merced de su addición a la imprenta. En realidad, es muy probable que con la economía cayendo en barrena imprimir moneda apenas afecte la inflación, y si los precios subieran eso sería de hecho bueno. […]