Entre editoriales unitarios sobre oscuros arreglos semiconstitucionales y el partido más importante del año (Força Barça!) el gobierno ha presentado el ¿borrador? de la ley de economía sostenible que lleva prometiendo desde hace meses.

Esta ley es, en teoría, un nuevo punto de partida para la economía española: un conjunto de reformas y cambios estructurales que deberán cambiar el modelo productivo del país. Con el nombre de la ley y las señales previas que habían soltado algunos ministros, me temía lo peor; una especie de mamotreto de promoción del panel sólar y el molino de viento, con alguna que otra regulación urbanística draconiana para hacer que construir una casa sea un proceso lento y doloroso. Nada realmente horrible (siempre que uno crea que tirar dinero en industrias no demasiado absurdas no es algo horrible), pero muy lejos del lavado de cara profundo que necesita la economía.

El proyecto de ley, al menos de momento, va más allá de la irrelevancia que temía, tocando una amplia variedad de temas y actividades. La reforma es de hecho bastante ambiciosa, si miramos todos los sectores en los que quiere introducir cambios; ir de cómo pagan las administraciones los contratos públicos a cómo se organiza la FP es tocar muchas teclas. El problema, al menos a primera vista, es que parece que abarca mucho pero aprieta poco – muchas reformas están muy poco detalladas o son relativamente poco ambiciosas por el momento.

Luis Garicano tiene un excelente análisis sobre el tema en Nada es Gratis, la música suena bien, pero falta ver si van más allá de una melodía agradable. Añado una pequeña lista con los cambios, con unas pocas notas:

  • Organismos reguladores: me ha sorprendido que estén en la ley; la verdad, no es mala idea hacer algunos cambios. La regulación de la competencia en España no funciona bien; reforzarlo es una idea excelente. Reducir el amigachismo de algunos reguladores con sus regulados también es imprescindible – especialmente en sectores ultraconcentrados como las eléctricas.
  • Mercados financieros: buenas ideas, bienvenidas. No son grandes cambios (a pesar de los pesares, en España no han funcionado demasiado mal), pero harán bien. Dejan de lado las cajas, que ya han pasado por el quirófano, con la ley cambiado las cosas (muy) poco a poco.
  • Mejores auditorias en la administración pública: en principio algo obviamente bueno si se hace bien. Muy necesario en autonomías y (sobre todo) ayuntamientos.
  • Reforma de la contratación pública: véase punto anterior. No soy un experto sobre el tema, sin embargo; los detalles los dejo alguien que sepa más sobre ello.
  • Simplificación administrativa: una de esas reformas absurdamente obvias, políticamente inofensivas y que deberíamos haber aprobado en tiempos de Calvo Sotelo. La ley en este caso hace algo quizás no demasiado ambicioso pero muy, muy necesario. Dentro de este apartado añaden algo como digitalizar el catastro, algo que deberíamos haber hecho hace diez años, y que deberíamos extender a toda la administración. El objetivo debería ser eliminar el papel completamente.
  • Sociedad de la información: mucho liberar frecuencias, poco aumentar competencia y apretar las tuercas a los operadores para que se concentren en bajar precios. La banda ancha universal es algo relativamente simbólico, pero que hará mucho bien; empujará el mercado con fuerza.
  • Ciencia y universidades: No suena mal, pero sé si la fuente de los problemas en España es el sistema de patentes o la titularidad de los descubrimientos. Sobre universidades, ya he comentado qué es probablemente lo que tenemos que hacer con ellas (incluye uso creativo de napalm); no sé si esta ley irá demasiado lejos. Aún así, favorecer la entrada de dinero privado puede hacer muchísimo bien. Los cambios en la fiscalidad son bienvenidos, aunque no soy un gran amigo de hacer política vía deducción.
  • Internacionalización: no sé qué papel puede jugar el estado en este aspecto. Me suena a política industrial, algo a lo que le tengo alergia. Las medidas no suenan demasiado dirigistas, de todos modos.
  • Formación profesional: imprescindible cambiarla si queremos que en España se fabriquen cosas. Si añaden una reforma en profundidad del horrible sistema de formación de empleo, es para tirar cohetes.
  • Sostenibilidad medioambiental: la Unión Europea tiene un buen sistema (¡en serio!) para regular emisiones mediante un mercado continental; la ley básicamente se lo toma en serio. Bien.
  • Transportes: en general bien; trenes por un tubo. No estaría mal que adelantaran la liberalización del transporte de viajeros en ferrocarril, no sólo en autobuses. No entiendo lo del coche eléctrico.
  • Ahorro y eficiencia energética: no entiendo la manía que le tiene el PSOE a las nucleares. No lo entiendo.
  • Vivienda: ¡viva el alquiler! Ya era hora. Comprar casas es algo malvado. Rehabilitar núcleos urbanos es una idea estupenda; veremos como se implementa.

¿Qué falta? primero de todo, concreción; hay muchos cabos sueltos. Mucho depende de cómo se desarrolle y concrete la ley. Segundo, el eterno problema de siempre: la reforma del mercado laboral, ese tema tabú de la política española. Tercero, la reforma judicial, otro tema urgente, parece que va en una ley separada; lo mismo que universidades y educación en general.

En agregado, es un ley que apunta maneras. No es estrictamente decepcionante, pero no es el cambio profundo necesario. Al mismo tiempo, es mucho mejor de lo que esperaba – y con un poco de energía (y si el PP colabora) puede ser incluso decente. Veremos; no es la imagen de la ambición, pero es un primer paso esperanzador.


14 comentarios

  1. citoyen dice:

    Sobre la simplificación administrativa, es algo que me causa un grado considerable de mala leche. Quiero decir, si realmente era posible hacerlo antes ¿por qué no lo habían hecho?

    Internacionalización: sí hay medidas no dirigistas para hacer este tipo de cosas. Las oficinas comerciales están para eso.

    Anteayer me preguntaba J que no ve como pueden llegar a plantear una reforma laboral. lo cierto es que en moncloa tampoco lo ven; pero es algo bastante importante en el medio plazo. Los sindicatos y el gobierno deberían saberlo; si no lo hacen ahora, lo harán cuando llegue el PP e irá peor. Me cuesta entender qué es tan complicado.

  2. Mario dice:

    Hombre, por faltar, falta que la Moncloa se decida a subir de una vez el texto articulado completo, y se deje de esos resúmenes que hace de la exposición de motivos.

  3. Roger Senserrich dice:

    Yo tampoco no entiendo por qué no se atreven a hacerlo en solitario. Con el paro al 18%, me parece que justificarlo es fácil.

    El problema es que el gobierno ha perdido la confianza de los votantes, así que la reacción inicial será negativa – tantos meses haciendo el mandril hacen que la reforma sea muy difícil de vender. No hace mucho hablaba sobre una posible forma de vender el asunto, no sé.

    Lo que no estoy tan seguro es que no hagan algo en unos meses, sin embargo. El río está sonando mucho desde hace semanas…

  4. d dice:

    ^^
    Bueno, que el PSOE apruebe una reforma laboral no significa que el PP renuncie a aprobar otra si llega al poder.

    ¿Cuál es el problema con lo del coche eléctrico?

  5. Interesante resumen, gracias.

    A mi muchas cosas me suenan decentes, pero me preocupa lo de siempre, la «concreción; hay muchos cabos sueltos».

    En cuanto a la universidad, estamos esperando la prometida ley de ciencia, pero supongo que por vergüenza es esperarán a tener dinero para presupuestar algo decente. Hace más de un año que toda petición recibe la misma respuesta «eso se contemplará en la nueva ley de ciencia».

  6. […] mi propio micro-análisis de este Anteproyecto me he basado ampliamente en los de Egócrata, así como la gente de FEDEA y Nada es Gratis, Jesús Fernández-Villaverde y Luis Garicano. Porque […]

  7. vicente dice:

    ¿Y qué hay de la «ayuda» a los bancos incluyendo una moratoria de tres años adicionales para actualizar el valor de terrenos urbanizables? Dificultará la depreciación de los activos y la vivienda seguirá sin tener un precio razonable.

    http://www.elmundo.es/mundodinero/2009/12/02/economia/1259739814.html

  8. manutc dice:

    El coche eléctrico es fundamental para que la producción de eólica de las noches no se tire, más que por cuestiones medoambientales.

  9. […] descontado, dejando de lado dos o tres chalados que leen cosas, parece que la blogocosa nacional ha decidido que todo eso es completamente […]

  10. andr dice:

    Una ley que vale la pena, y al final parece que lo único que importa es internet.

    Con ese tipo de «mentes» pensantes, así está este país

  11. migrad dice:

    andr totalmente de acuerdo en que la ley vale la pena, pero entonces ¿por qué han colado unos artículos que no tienen nada que ver con la economía y sí con censurar parte de internet?. No entiendo si lo que pedimos todos los ciudadanos, es que el gobierno actue contra la crisis, nos muestre una ley que nos quita los derechos más básicos de los ciudadanos en la red, además de que la Disposición final primera es totalmente anticonstitucional, ya que nos convierte en un pais como China, Cuba o Irán en censura de internet. ¿De verdad aprobarias una ley, que por muy buena que sea, podría permitir que el gobierno (el que fuera) pudiese bloquear el acceso a las webs opositoras? como ya ocurre con China, Cuba, Irán, Venezuela…

  12. […] con el gobierno. No es que no hayan pasado reformas que me gustan (la reforma de las pensiones o la ley de economía sostenible, “cláusula Sinde” incluída, me han parecido buenas ideas, y las propuestas sobre […]

  13. […] buena noticia: la Ley de Economía Sostenible, un texto con un montón de buenas ideas, ha sido aprobada. La inmensa mayoría de reformas en ella las deberíamos haber aprobado hace diez […]

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