Algunos comentaristas (servidor incluido) llevan una temporada quejándose que el larguísimo, eterno periodo de transición entre administraciones está haciendo un daño serio a la economía americana. Lo cierto es que la administración Bush, siguiendo con ocho años de orgullosa tradición en incompetencia, está cubriéndose de gloria no haciendo nada, escondiéndose por las esquinas, y pasando planes de rescate espantosamente malos a mega-bancos en problemas.

Si algo hemos aprendido estos últimos meses es que Obama será muchas cosas, pero no es tonto. Los mercados andan aterrados de lo mal  que pinta todo, así que el tipo está dándose prisa en poner sobre la mesa sus planes para enero. Sonará raro, pero anunciar tu equipo económico 20 días después de las elecciones es moverse a velocidad de vértigo en política americana, y esto es lo que ha hecho hoy oficialmente: dar nombres, y hablar de políticas concretas.

Primero empezaron esta semana hablando de sus proyectos de plan de estímulo. Durante la campaña, hablaron de 175.000 millones; estos días no dan cifras concretas, pero se especula que piensan en 500.000 en dos años.  Es básicamente un 3% del PIB, un empujón más que entusiasta a una economía que está metida en una espiral muy, muy peligrosa. La cifra es tan elevada para compensar el espantoso efecto pro-cíclico que tienen las limitaciones al gasto de estados y ciudades; si se tiene en cuenta la contracción de gasto en otros niveles, el estímulo estará alrededor del 1,5% del PIB.  Se lo han tomado en serio.

Segundo, parece que la gente de Obama se ha cansado de esperar, y estando abriéndose paso a codazos en la toma de decisiones. El plan de estímulo está siendo puesto sobre la mesa ahora con el objetivo que el Congreso lo vote el día de toma de posesión y Obama lo firme el mismo día que entra en la Casa Blanca; por añadido, el equipo económico de Obama va a empezar a tomar decisiones ahora mismo en no pocos aspectos. Parece que están enviando proyectos al ejecutivo actual ya ahora y empezando a trabajar para que se aprueben en cuanto tomen posesión. Los mercados odian el vacio; la nueva administración quiere ocuparlo rápido.

Hablando de equipo económico, Obama sigue añadiendo nombres, todos ellos siguiendo el perfil de cerebros brillantes, extremadamente competente y básicamente pragmáticos; moderados con ganas de cambio y los pies en el suelo. Larry Summers, el asesor económico principal, es un veterano de la era Clinton (otro), muy inteligente, hábil y pragmático. Christina Romer, la brillantísima esposa de David Romer, será la presidenta del consejo de asesores económicos, una posición clave.

¿Conclusión? en contra de su predecesor, parece que Obama se va a tomar esto de gobernar muy en serio, primero, y segundo, él y su equipo son perfectamente conscientes que la situación es crítica, quizás incluso irreparable. Los problemas son serios de verás.


2 comentarios

  1. Avelino dice:

    Hola Egócrata/Roger

    Una pregunta, ¿en esta prolongación de Materias Grises/Because the other day vas a hablar sólo de la política de EEUU?

  2. […] no cosas de niñas como granadas: dinamita, solución nuclear, la madre de todos los estímulos fiscales, el equivalente fiscal a la Ascensión y la Gehenna […]

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