Es oficial: McCain no sólo ha escogido como candidata al a vicepresidencia una populista sin talento y con nula capacidad intelectual. Sarah Palin, aparte de sus otras virtudes, es una persona vengativa, deshonesta y que no tiene reparos en recurrir al abuso de poder para librarse de alguien que le cae mal.

No lo digo yo; lo dice un informe redactado por republicanos y demócratas de una comisión independiente en Alaska, detallando la conducta de Palin en el despido de Walt Monegan, comisario de seguridad pública del estado. El comisario se negó a despedir un policía que la gobernadora quería en la calle debido a una discusión familiar (Michael Wooten, el policía, se había divorciado de la hermana de Palin) y la gobernadora y toda su familia le presionaron de forma incesante para que lo echara. En vista que no colaboraba, Palin echo a Monegan en la calle. El informe dice que el despido es legal, pero el acoso previo a Monegan y Wooten no lo es, siendo un abuso de poder claro.

Lo más delirante de todo este asunto, digno del cacique de provincias más cutre de la España profunda en un día malo, es que la investigación empezó meses antes que McCain escogiera a Palin para la vicepresidencia. Mis sospechas cuando el candidato republicano tomo esta decisión (que Palin estaba espantósamente mal preparada y que McCain tomó la decisión al tuntún, a ver si cuela) resulta que eran patéticamente ciertas. McCain improvisó la nominación; nadie en su campaña había dedicado más de 10 minutos a mirar quién era Palin en Google. El tipo básicamente se lanzó al vacío, confiando que hubiera agua en el fondo.

Bueno, no la hay.
¿Cómo afectará esto la campaña? Un poco, pero no demasiado. La noticia ha salido un viernes por la noche (literalmente; el informe se publicó a las 6 PM hora de Alaska, 10 PM hora este), así que no recibirá demasiada cobertura en un fin de semana largo. Aparte, los periodistas están demasiado ocupados cubriendo el desastre financiero, y la verdad, Los números de McCain en las encuestas son tan espantosos (estar a 7-8 puntos a estas alturas es horrible) que no parece que pueda empeorar demasiado más.

Las cosas van tan mal, de hecho, que se dice, se comenta, se rumorea (a saber si es cierto) que el partido republicano está planteándose seriamente dejar de emitir anuncios para las presidenciales y concentrar sus recursos en tratar de contener el naufragio en el Congreso, defendiendo senadores como puede. Recordad, McCain está bajo financiación pública; sólo tiene 85 millones de dólares en su bolsillo. El partido y su campaña son cosas distintas, y sí, pueden abandonarle a su suerte, compitiendo con un Obama que tiene dinero para aburrir (y sin límite de recaudación o gasto). McCain lo tiene cada vez más difícil; no hará falta hablar de estados decisivos esta vez, si siguen así las cosas.