Política

Una coalición de perdedores

10 Sep, 2014 - - @jorgegalindo

Vivimos tiempos interesantes para la izquierda española. La irrupción de Podemos se combina con el estancamiento de IU y la decadencia del PSOE para dibujar un escenario incierto, y que probablemente lo seguirá siendo durante los próximos años. Aún es pronto para sacar conclusiones, pero podemos emplear los datos disponibles para explorar hacia dónde va la reconfiguración de la izquierda y entender así mejor las estrategias actuales y futuras de los principales partidos. La encuesta postelectoral del CIS tras las elecciones europeas de mayo de este año es, de hecho, la única fuente de que disponemos. Sus datos pintan un panorama poco alentador para los actores tradicionales, quedando claro que Podemos cuenta con la mano fuerte en esta partida que, al fin y al cabo, consiste en lo que todas las partidas políticas: crear y mantener una coalición de votantes lo suficientemente sólida como para alcanzar el poder, o al menos influir en él. Y la coalición de jóvenes, perdedores potenciales y desencantados parece la apuesta perfecta en una situación de crisis cuya solución está en punto muerto, tanto en Madrid como en Bruselas.

Una perspectiva de clase ocupacional es particularmente reveladora. Observemos el recuerdo de voto por partido y perfil, esto es, qué porcentaje de cada colectivo dio su apoyo a cada formación. Mientras el PSOE tuvo un éxito superior entre los parados, los pensionistas y los obreros no cualificados, Podemos captó más votos de los estudiantes y el personal de administración y servicios. Existe cierto solapamiento entre ambos partidos en obreros no cualificados y parados, como lo hay también con IU respecto a esta última categoría. La coalición, por su parte, destaca entre éstos, pero lo hace aún más entre profesionales y obreros cualificados.

ocupacional

La siguiente tabla permite apreciar la diferencia entre el recuerdo de voto de cada grupo profesional para cada partido y la media de dicho partido. Esto pone en negro sobre blanco los resultados del gráfico anterior: aunque todos los partidos de izquierdas tienen apoyos particularmente altos entre obreros no cualificados y parados, Podemos destaca más que IU y PSOE. Además, es el único partido de izquierdas que se encuentra sobrerrepresentado entre estudiantes y personal del sector terciario. Estos son, a mi entender, los cuatro grupos ocupacionales clave para el nuevo partido.

ocupacional2

El PSOE, por contra, parece, si no envejecido, sí anclado en el pasado. Su mayor bastión son los pensionistas; este hecho tiene un claro reflejo en la correlación positiva entre edad y recuerdo de voto a los socialistas. Tanto Podemos como IU muestran la relación opuesta, en un contraste muy llamativo.

edad

Algo similar sucede con el nivel de estudios, probablemente correlacionado con la edad (es más probable encontrar a personas sin estudios o con estudios primarios entre los más mayores).

estudios

Como consecuencia, Podemos es el partido que presenta un mayor recuerdo de voto entre los menores de 35 años. Es así de sencillo.

jovenes

Pero no hay que pensar que la irrupción de la nueva formación es la causa última de estas dinámicas. Más bien parece que Podemos ha sido capaz de aprovechar un proceso que ya estaba en marcha. A continuación se ofrece una comparativa entre porcentajes de identificación con un partido determinado (PSOE e IU) entre 2008 y 2014 según grupo ocupacional, empleando una encuesta anterior a las elecciones europeas. El objetivo es observar en qué segmentos han ganado o perdido seguidores.

ocupacionalfinal

Efectivamente, el PSOE ha perdido identificación ciudadana en todo ámbito, pero sobre todo allá donde Podemos e IU han ganado, claro: estudiantes, trabajadores de servicios, cuadros medios y obreros cualificados. La coalición de izquierdas, por su parte, ha ganado en segmentos que no son precisamente los (mayores) perdedores de la crisis.

Podemos, por contra, parece haber sido capaz de aunar el enfado con la crisis y la «clase política» junto a la falta de expectativas de una parte importante de la población. Sus principales caladeros de votos son de aquellos que más tienen que perder. Personas más bien jóvenes y formadas, estudiantes que se ven sin un futuro por delante, trabajadores del sector terciario sin excesiva cualificación, parados y obreros sin el capital humano necesario como para asegurarse un futuro. Es el miedo a la pérdida de un estatus que, hasta hace poco, se daba por sentado.

Que IU ha visto pasar por delante de sus narices una oportunidad de oro y la ha dejado escapar es algo que pocos dudan, creo que ni siquiera los miembros de la organización lo hacen. Ahora pueden verse reducidos a representar a quienes podríamos llamar burgueses (o trabajadores con aspiraciones de prosperidad) bienintencionados. Lo cual, dada la situación, no parece demasiado prometedor. Dado que no pueden competir en ningún eje (ni izquierda-derecha ni renovación-continuismo) con Podemos, la estrategia más lógica de que disponen es intentar sumarlos a la coalición. Por descontado, y tal y como está haciendo, Podemos no transigirá fácilmente a perder uno de sus principales atractivos: la novedad, la diferenciación con lo que ya existía y, bajo su lógica y la de sus votantes, está corrupto.

Mientras Izquierda Unida se queda con un espacio cada vez más claramente delimitado en el que tiene poca capacidad de maniobra, el PSOE parece encaminarse hacia su consolidación como defensor de «progresistas conservadores»; esto es, baluarte de quienes menos perdieron con la crisis así como de quienes más dependen de las rentas que este partido ha sido capaz de ofrecer hasta ahora a través de políticas redistributivas. La alternativa, en realidad, no sería nada distinto a lo que la socialdemocracia europea lleva haciendo desde principios del siglo pasado: llegar a acuerdos para poder cambiar las cosas y gobernar al mismo tiempo. Sin embargo, los socialistas se encuentran con dos barreras para lograr tal objetivo. La primera es que, al igual que IU pero en un grado mucho mayor dado su tamaño y pasada responsabilidad de gobierno, pertenecen a ese pasado que hoy se identifica con corrupción, mala gestión política y ‘capitalismo de amiguetes’. La segunda es mucho más importante y difícil de superar, pues no depende tanto de la mera percepción de los ciudadanos, o no se resuelve con una renovación de la cúpula dirigente: el actual diseño europeo impide que los partidos principales en los países deudores puedan hacer más que repartir los costes (y ni siquiera están haciendo esto en muchos casos). Más concretamente, parece imposible que se puedan llegar a acuerdos que incluyan estímulo fiscal y monetario a cambio de reformas estructurales. Estímulos y reformas que vendrían a mejorar las expectativas de los actuales perdedores sin erosionar las de quienes han quedado más o menos protegidos del vendaval. La única solución a este obstáculo es la reforma de la arquitectura de la UE, o cuanto menos de la Eurozona. Es difícil mas no imposible. Pero exigiría dejar de utilizar a Bruselas como chivo expiatorio, lo cual parece demasiado tentador para el PSOE y para el resto de partidos.

Estos dos obstáculos son, a su vez, las fuentes más importantes de legitimidad con las que cuenta Podemos. Un partido nuevo que no tiene servidumbres, y ahí radica su ventaja comparativa fundamental. También frente a IU. De hecho, toda la estrategia que rodea al asalto al poder de Iglesias y compañía va encaminada a explotar dicha ventaja. En lugar de actuar como un partido que nace de las coaliciones más o menos explícitas entre grupos y clases sociales, se parte de una estructura vertical para plantear objetivos maximalistas, basándose en coaliciones de utilidad táctica, pero jamás enunciadas, siempre bajo el paraguas de «todo lo que no es casta». En esto tampoco es tan distinto de cómo nacieron y crecieron otras formaciones en España. Su opción alternativa, pasar a convertirse en un partido socialdemócrata a la izquierda del PSOE y a la derecha de IU, es, por el momento, mucho menos ventajosa. Mientras puedan seguir explotando a Bruselas y a la casta como explicaciones de todo lo malo. Y podrán hacerlo, o tendrán un margen mucho más amplio para ello, mientras el PSOE no sea capaz de plantear una coalición alternativa que incluya a los perdedores, y proponga cambios para eliminar las barreras que se lo impiden.


45 comentarios

  1. Una lectura interesante aunque yo no veo ese maximalismo en los objetivos de Podemos (supongo que esto depende de dónde entienda uno que están los máximos), ni creo que establezcan la misma diferenciación contra todo el establishment político (creo que en el texto se da a entender que Podemos ubica a IU y PSOE en la misma categoría con diferentes niveles de intensidad, cuando en mi opinión trazan una línea bien clara entre el bipartidismo de PP y PSOE y otras opciones, por mucho que discursivamente y como márketing político, sepan que la novedad es un valor que también les diferencia de los segundos).
    Una pregunta, ¿cómo defines ese colectivo de «burguesía bienintencionada» que mencionas como potencial granero de votos de IU?

    • Jorge Galindo dice:

      «por mucho que discursivamente y como márketing político» – eso es lo que no tengo tan claro. Mientras sigan dejando aparte de posibles coaliciones a IU (o a Compromís, etc) pensaré que no es solo marketing.

      «burguesía bienintencionada» (de hecho, debería haber escrito «aburguesados pero bienintencionados») o trabajadores cualificados con ganas e intención de prosperar vendrían a ser profesionales y técnicos así como obreros cualificados en las categorías arriba descritas. Creo que IU va a seguir perdiendo pie entre las capas más necesitadas de la sociedad española.

      • juan dice:

        El tema es que Podemos va a ser el voto útil de los desfavorecidos, por el mero de hecho de parecer que ha hecho más pupa al establishment. Mucho de ese voto era entre abstencionista o potencial segmento de crecimiento de IU (que ya no va a tenerlo).

      • Gracias por la respuesta.
        ¿Dónde han dejado (explícitamente) fuera de coaliciones a IU y Compromís?
        En cualquier caso a lo que me refería con el tema del marketing es a que saben que gozan de un valor de novedad que no tiene IU, pero eso no significa que traten a esa formación de la misma forma que al PSOE (y en concreto, a su cúpula dirigente). A Podemos no le conviene darse la mano de IU, cierto, pero tampoco tienen una intención de tratarles como al PSOE (es decir, de atizarles por responsables del pifostio que tenemos montado).

        -«aburguesados».
        Vale. Yo personalmente no lo usaría, pero no me hace saltar el sentido arácnido como leer «burgueses» 😉

    • Bran Miller dice:

      Estoy de acuerdo contigo en que la cuestión del maximalismo está abierta a discusión, dependiendo del criterio personal de cada uno. Pero creo que la palabra hay que interpretarla según su sentido literal, que es el de plantearse objetivos ambiciosos. A mí no me cabe duda que la renta básica universal y otras propuestas entran en esa categoría, con independencia de si son realizables o no. El problema con esa expresión es el mismo que existe con el ‘populismo’. Mientras que ‘maximalista’ se emplea como sinónimo de «fantasías irrealizables y peligrosas que nos llevarán al desastre», la otra palabra se emplea como arma arrojadiza contra los adversarios políticos y se emplea en los medios poco más o menos que como sinónimo de ‘autoritarismo’. En su acepción neutra (entrecomillo la definición de la Enciclopedia Británica) implica simplemente «programa o movimiento político que aboga por el ciudadano común» frente a las élites políticas o económicas que, «en su forma más democrática, busca defender los intereses y potenciar al máximo el poder del ciudadano común, por la reforma en vez de por la revolución».

      Yo personalmente pienso que los tiempos se prestan al maximalismo y que la situación de bloqueo en Madrid y Bruselas que se menciona en el artículo requiere soluciones imaginativas. Parte del éxito de Podemos estriba en que sus propuestas suenan distintas al discurso de los partidos establecidos. No entro a valorarlas ni tampoco a juzgar si unos partidos representan más al ‘establecimiento’ que otros. Lo que es evidente es que, citando a Pilar Barreiro, «Podemos gana porque sabe hacer un diagnóstico que coincide con el de los ciudadanos» que «es clarísimo: una desigualdad creciente, pobreza creciente y la sensación de no formar parte de los procesos». Mientras que los demás partidos se empeñen en batallas que interesan poco a los ciudadanos comunes, seguirán perdiendo. En el fondo es tan simple como eso.

      • Bran Miller dice:

        Estoy de acuerdo contigo en que la cuestión del maximalismo está abierta a discusión, dependiendo del criterio personal de cada uno. Pero creo que la palabra hay que interpretarla según su sentido literal, que es el de plantearse objetivos ambiciosos. A mí no me cabe duda que la renta básica universal y otras propuestas entran en esa categoría, con independencia de si son realizables o no. El problema con esa expresión es el mismo que existe con el ‘populismo’. Mientras que ‘maximalista’ se emplea como sinónimo de «fantasías irrealizables y peligrosas que nos llevarán al desastre», la otra palabra se emplea como arma arrojadiza contra los adversarios políticos y se emplea en los medios poco más o menos que como sinónimo de ‘autoritarismo’. En su acepción neutra (entrecomillo la definición de la Enciclopedia Británica) implica simplemente «programa o movimiento político que aboga por el ciudadano común» frente a las élites políticas o económicas que, «en su forma más democrática, busca defender los intereses y potenciar al máximo el poder del ciudadano común, por la reforma en vez de por la revolución».

        Yo personalmente pienso que los tiempos se prestan al maximalismo y que la situación de bloqueo en Madrid y Bruselas que se menciona en el artículo requiere soluciones imaginativas. Parte del éxito de Podemos estriba en que sus propuestas suenan distintas al discurso de los partidos establecidos. No entro a valorarlas ni tampoco a juzgar si unos partidos representan más al ‘establecimiento’ que otros. Lo que es evidente es que, citando a Belén Barreiro, «Podemos gana porque sabe hacer un diagnóstico que coincide con el de los ciudadanos» que «es clarísimo: una desigualdad creciente, pobreza creciente y la sensación de no formar parte de los procesos». Mientras que los demás partidos se empeñen en batallas que interesan poco a los ciudadanos comunes, seguirán perdiendo. En el fondo es tan simple como eso.

  2. Estilpon dice:

    Gracias por el artículo, pero la antepenúltima frase me chirría bastante. ¿Podemos a la derecha de IU? Si no me equivoco, y revisando sus vídeos, intervenciones y textos en distintos lugares, los dirigentes de Podemos consideran IU como «socialdemócrata» y «aburguesado».
    Ahora están en el puro tactismo para conseguir el poder (Izquierda Anticapitalista, Liga Comunista Revolucionaria etc…son sus referentes), luego «nos enteraremos»…
    Y precisamente esa es la debilidad: la distancia REAL con gran parte de sus votantes, ¿votantes prestados?

    • juan dice:

      Es que hay un cambio de ejes, el votante muy comprometido de IU se ve a si mismo como muy de izquierdas aunque a lo mejor es un liberado sindical de una gran empresa, con un buen sueldo «por tareas sindicales» y sigue viendo a un panadero como un «empresario».
      El votante de Podemos tiende a ver a un «liberado sindical de gran empresa» como un burgués, mientras que ve a un panadero o quiosquero como unos trabajadores con mucho curro para poca renta. (más cercanos a la realidad pues).

      No olvidemos que los sindicatos no tienen empacho en firmar convenios colectivos con dobles escalas salariales, donde el joven nuevo que se incorpora para una determinada categoría cobra la mitad.

      • Estilpon dice:

        Puedo estar de acuerdo, pero lo que piensa el votante de Podemos no es lo que piensan los que controlan su agenda…

        • juan dice:

          Claramente la agenda de Podemos está priorizando aquello que puede ser común a una tipología de votantes muy transversal.

  3. Jorge Galindo dice:

    Gracias a ti por el comentario. Los votantes de Podemos se sitúan en la escala ideológica a la derecha de IU y a la izquierda del PSOE. Por eso los ubico en ese punto.

  4. Durruti77 dice:

    Esto de la coalición de perdedores recuerda un huevo a aquel fantasma que recorría Europa incitando a los pobres del mundo a asaltar los cielos… No sé si la Historia se repite, pero un poco de guasa sí que tiene ;).

  5. menoscabo dice:

    Analisis muy interesante, habra que ver como evoluciona. A su vez, ¿ como creeis que afectaria una posible coalicion de UPyD y Cs?
    Creo que en las proximas nacionales veremos tres grandes bloques: PPSOE; Podemos+IU+Equo+Compromis…; UPyD +Cs

    • Alatriste dice:

      Si eso que dices ocurriera – que no va a ocurrir ni de broma, en mi opinión – no veríamos tres grandes bloques: veríamos uno solo, porque una supuesta coalición entre PP y PSOE sumaría como mínimo un 50% de los votos y bastante más de 200 diputados, tal vez hasta 2/3 del congreso. Todo el resto sería irrelevante.

      Pero el caso es que las tres coaliciones son como poco altamente improbables…

      – IU y Podemos no van a aliarse, IU porque jamás ha participado en ninguna alianza que no dominara y porque aceptar un papel subordinado a un joven advenedizo mediático como Pablo Iglesias sería anatema para el liderazgo del PCE (aparte de que sería casi lo mismo que suicidarse), Podemos tampoco porque sería sacrificar su mejor carta, la de presentarse como algo radicalmente nuevo demonizando a todos los partidos anteriores a ellos como «la casta», y porque diluiría el papel estelar de su líder.

      – UPyD y Cs probablemente no llegaran a nada en sus conversaciones tampoco. La idea de esa coalición no es nueva, pero Rosa Díez y su círculo siempre la han rechazado sin explicar nada bien por qué (en mi opinión personal porque su principal razón para ello es que temen acabar ayudando a Rivera a convertirse en una figura política de nivel nacional, alguien capaz de hacerles sombra, y antes que eso prefieren perder los votos y la influencia en Cataluña que les aportaría la alianza)

      – Y en cuanto a PP y PSOE… pues mira, no. Vale que desde IU lleven años intentando colar lo del PPSOE y que los dos son lo mismo por la cuenta que les trae, pero todavía hay clases. Semejante coalición sería imposible antes de las elecciones por mil razones – las primeras que los militantes de los dos partidos no la aceptarían de ninguna manera, que sería imposible acordar un programa conjunto, y que sería igual de imposible convenir un candidato a la presidencia – y la cosa solo cambiaría después de las elecciones si un gobierno de gran coalición fuera la única alternativa que quedara, que a la fuerza ahorcan.

      Y por si te queda alguna duda de que los tiros no van precisamente por ahí, mira la reforma electoral de Cospedal y la que planea Rajoy. La cosa para el PP no va de coaligarse con nadie para conseguir más escaños, va de encargarse un traje a medida que les permita conseguir los mismos con muchos menos votos.

      • menoscabo dice:

        lNo me he explicado del todo bien, obviamente PP y PSOE irian solos en las elecciones, pero veo mas probable que hagan pactos postelectorales en aquellos sitios donde la otra opcion para pactar sea Podemos.
        IU, Podemos, Equo, … ya estan coaligandose en algunos municipios a traves de la plataforma Ganemos, entiendo que es un primer experimento de colaboracion, y creo que su intencion real es que Podemos fagocite IU (aunque estos puedan querer lo contrario).
        Por ultimo, las negociaciones entre UPyD y Cs pueden derivar en coaliciones puntuales en ciertas autonomias, por ejemplo Madrid, y en una coalicion para las nacionales. No lo descartaria.
        En mi opinion, se estan dando los pasos para que en lad proximas nacionales los ciudadanos se tengan que decantar entre tres opciones (sin contar los partidos nacionalistas):
        1. Lo clasico: PP o PSOE
        2. La «nueva» izquierda: Podemos (fagocitando o en coalicion con IU, Equo, etc)
        3. La llamada tercera via: UPyD
        en coalicion con Cs
        Creo sinceramente que esa sera la disyuntiva con la que se encuentren los ciudadanos, por ese motivo me gustaria leer un analisis no solo sobre como Podemos afectaria a la mesa de juego, sino tambien como lo haria añadiendo un CUPyD al tablero.
        Desde luego, se presenta antenosotros probablemente el año politico mas interesante en la democracia española de las ultimas decadas.

        • Molari dice:

          Los Ganemos, salvo Madrid y Barcelona, son inventos/trampa de IU para evitar perder del todo su suelo electoral.

          Sin embargo Podemos no parece estar entrando en el juego, dicen que lo decidirán en la Asamblea Constituyente que termina en noviembre.

          Y yo apostaría a que el 90% de los Ganemos, sin Podemos se desinflan.

      • juan dice:

        Lo de UPyD y C’s tiene el problema añadido que ni sumando podrían entrar en una mayoría de distritos, en unas pocas provincias más que ahora pero no muchas más (con los % que les dan las encuestas ahora digo).

  6. Un gran análisis, muy descriptivo. Pienso que aquí hay una cuestión clave, las fuentes de votos de cada partido pueden cambiar. Todavía no se han elaborado los programas, que serán fundamentales para la credibilidad del proyecto. Al PSOE le puede quedar la duda de si luchar con Podemos e IU por el voto a su izquierda o ganar votos por el centro.

    Podemos puede radicalizarse, con lo que seguro que obtendría menos votantes pero más fieles, o por el contrario, podría moderarse. Creo que la mayoría de las propuestas macroeconómicas son irrealizables o inconvenientes, pero es cierto que hasta ahora se les vincula más a la lucha contra la injusticia. Podemos todavía está en construcción. Creo que si moderan sus posturas y las centran en la lucha contra las situaciones particulares de injusticia, más que en la búsqueda de una economía planificada, pueden llevarse una parte mayor de los votos del PSOE.

    Y luego está el mayor contrincante que creo que van a tener todos los partidos, la abstención.

    Un cordial saludo.

  7. Navarta dice:

    Bueno, lo de Podemos, según se desprende este artículo, cada vez se parece más a un movimiento de tipo transversal como el Peronismo argentino, donde tienen cabida desde montoneros a conservadores nacionalistas.
    Algo que debo agradecer a Podemos, es precisamente que a través de su génesis, me haya hecho enterder por fin,
    como es posible la existencia de un partido como el Peronista donde todo tiene cabida.

  8. Ramón García dice:

    Tengo una objeción o hipótesis sobre la interpretación de la encuesta postelectoral del CIS. Mi intuición y la evidencia anecdótica de mi entorno es que los defensores de Podemos son personas de bajo capital humano. Aunque muchos sean titulados universitarios, nuestras universidades tienen mucha mediocridad, y servían como forma de retrasar la incorporación al paro. Los titulados superiores de Podemos que veo a mi alrededor son gente que tiene notas dudosas, no sabe inglés, etc. El otro rasgo común de votante de Podemos que observo es gente que tomó decisiones equivocadas (ejemplo: comprar una vivienda sobrevalorada) y ahora no acepta las consecuencias de sus decisiones (con algo de razón, a la gente se la empujó a comprar casa).

    Así, pienso que hay un techo natural a este tipo de votantes.

    • Cefiros34 dice:

      Estoy claramente de acuerdo con lo de «bajo capital humano», por no usar otras palabras. Son los votantes menos autocríticos que jamás ha tenido un partido político. Ven Cuatro y La Sexta, cuyo perfil de audiencia es de clase baja. En España los títulos universitarios los regalan, pero la inteligencia, el esfuerzo y la cultura no los pueden expedir tan fácilmente. El otro día conocimos que la mitad de los parados abandonó los estudios a los 14 años y que de media los jóvenes españoles tardan 9 años en terminar su licenciatura (de media, con un par)
      En efecto, el votante de Podemos ni asume su mediocridad ni sus errores y por lo tanto necesita un salvador que reconozca su vida o que, al menos, fastidie a los que sí hicieron bien las cosas mientras ellos metían la pata. Y eso es Podemos y ninguna otra cosa. Un partido que desde el nombre ya demuestra que no busca un voto reflexivo, sino un voto con la entrepierna. El país no da para más, por otra parte.

    • juan dice:

      Ramón y Cefiros34, generalizais interesadamente. En mi caso, simpatizo con Podemos, he sido emprendedor-empresario, he creado puestos de trabajo, y he vendido la empresa (por imposibilidad de conseguir financiación requerida para seguir, sin dar ningún pelotazo) a una empresa del Nasdaq. Me apaño con el inglés. A día de hoy aún no he conocido a nadie de UPyD que aparte de teorizar haya hecho algo, y no afirmo que nadie de UPyD ha hecho nada jamás. No los conozco a todos.

      Tampoco lo que dice el CIS en la segmentación de voto hace coincidir al votante de Podemos con los que dejaron el colegio y se pusieron a poner ladrillos, más bien lo contrario.

      Respecto a la frase «El otro rasgo común de votante de Podemos que observo es gente que tomó decisiones equivocadas (ejemplo: comprar una vivienda sobrevalorada) y ahora no acepta las consecuencias de sus decisiones (con algo de razón, a la gente se la empujó a comprar casa).»

      ¿Valdría decir que el votante típico del PP es el tomó decisión equivocada, «me hago unas autopistas de peaje y me forro, me hago un almacén de gas llamado Castor y me forro», y como sus decisiones no fueron buenas que el estado (todos) me pague el negociete fallido?

      • Cefiros34 dice:

        Es cierto, en España no hay un problemas de paro, bajo nivel educativo o hipotecas impagadas. El verdadero drama es el de la cantidad de gente con almacenes de gas que fracasan, algo que afecta especialmente a la mayoría de los votantes del PP. ¿?
        En fin, dejémoslo. Si tienes más de dos euros y ganas de hacer algo con tu vida en este país, votar a Podemos es de ser imbécil. No digo que lo seas, claro. Pero ser emprendedor y votar a un grupo oscuro de profesores comunistas es de una lógica acojonante. Bravo.

        • juan dice:

          Y veo Sálvame de Luxe. No creo en los estererotipos.

          Creo que has entendido perfectamente, cada uno a su nivel tiende a buscar la culpa en otros y pedir al estado que resuelva los problemas, los grandes liberales los primeros. Rodrigo Rato aceptó un cargo para el que sabía que pronto o tarde necesitaría rescate y sigue yendo de liberal.

          ¿es lógico cuando se ve que Florentino pide el dinero del Castor, que uno no se pregunte la razón por la cuál un banco no asume la tasación que un día hizo y acepta las llaves como pago de la hipoteca?

          Y bueno, ese ejercicio que haces de querer asignar los votos de Podemos a gente que no va a poder pagar su hipoteca no tiene demasiada lógica. Tampoco veo muy lógico insultar a los votantes de una opción política.

          Respecto a las hipotecas, ahí hay una doble culpa, de quien se sobreendeudó (muchas veces sólo para una vivienda normal inflada de precio por la sobreliquidez) y de quién sobreendeudó a la gente que sólo quería tener una vivienda para vivir (como se ha tenido toda la vida, incluso la gente más humilde, en este país).

          • Cefiros34 dice:

            Desconozco lo que es Rodrigo Rato o no, y poco me importa. Pero para decir que los liberales esperan que el Estado resuelva los problemas hay que ser un completo ignorante en temas de liberalismo. Acojonante, Juan xD

            Respecto a las hipotecas, la mayoría de las impagadas ya están obteniendo ración en pago. Y nada tiene que ver esto con el proyecto Castor ¿Citas cosas al azar como Pablo Iglesias para intentar argumentar sobre cualquier tema?
            Si la gente solamente quería tener una vivienda para vivir, se puede vivir de alquiler. Es más, la mayoría de los desahucios en España son por impago de alquiler (algo que nunca dirá Cuatro o La Sexta). En las grandes ciudades pueden llegar a ser el 90%, y eso nada tiene que ver con los bancos ni con Castor ni con nada.

            • juan dice:

              No me llames ignorante. No acabo de entender porque hay que descalificar.

              Siempre se ha definido a Rodrigo Rato como el ala liberal del partido. Igual va a ser porque yo llamo liberales a los que dicen que lo son pero «para sus asuntillos no lo son», luego no lo son pero dicen que son.

              A lo mejor es que liberal-liberal no hay nadie o no es ninguno de los empresarios de este país. Es decir, sólo hay liberales de salón con plaza de funcionario o de funcionario de gran empresa.

              Lo del Castor y las radiales es un gran ejemplo de cómo «empresarios» intentan unas aventuras donde si hay beneficios serán para ellos y si hay pérdidas tratarán de socializarlas a toda costa.
              Como la discusión aplica a los «que toman decisiones» pero no quieren asumir «las consecuencias» de que salgan mal, yo equiparo a los hipotecados por tener vivienda con estos «empresarios con respaldo del BOE».

      • Ramón García dice:

        A una persona preparada no le interesa una España cerrada al exterior de Podemos. Como explicaron Luis Garicano, Tano Santos, y Jesús Fernández-Villaverde en su gran artículo «No queremos volver a la España de los años 50» (escrito cuando el gobierno quería salir del euro en verano del 2012)

        «La esperanza que tienen los que sueñan con esta quimera es que España rebotaría en dos años. Y sí, tarde o temprano, lo haría. Pero esa España sería la España de los 50, con ingresos bajos, derivados del turismo, con baja productividad, bajos costes y con un control brutal ejercido por los caciques locales, que controlarían los monopolios de la nueva economía cerrada. Del control de cambios y de exportaciones, aparecería, como en Argentina, una nueva clase privilegiada, estrechamente ligada al poder, nacida del chanchullo, la chapuza y el compadreo. Nosotros no nos reconocemos en esa España, que hemos pasado varias generaciones enterrando. Y como nosotros, muchos otros. Sin ir más lejos, Cataluña y el País Vasco verían su independencia como más atractiva que nunca.»

        Así sería la España de Podemos: un país como Argentina donde para ganar dinero hay que tener amigos en la política. Donde la gente preparada se va del país. Y ya sé que estamos más, pero, repito, hay que distinguir entre ir a mejor e ir a peor.

        • juan dice:

          Ramón, leo tus frases….

          «Pero esa España sería la España de los 50, con ingresos bajos, derivados del turismo, con baja productividad, bajos costes y con un control brutal ejercido por los caciques locales, que controlarían los monopolios de la nueva economía cerrada.»

          «un país como Argentina donde para ganar dinero hay que tener amigos en la política. Donde la gente preparada se va del país. Y ya sé que estamos más, pero, repito, hay que distinguir entre ir a mejor e ir a peor.»

          …y digo ¿no te das cuenta que eso es ya la España de hoy?

  9. Alfonso IX dice:

    El comentario de Ramón García es antológico. Me tengo que hacer ya una camiseta con «los defensores de Podemos son personas de bajo capital humano». ¡Bajo capital humano, hoygan! Cuando una persona puede ser «de bajo capital humano» es hora de cerrar el chiringuito. Madre mía.

    • Ramón García dice:

      La expresión «capital humano» es frecuente para referirse a la calidad de su formación que condiciona su capacidad de ganar dinero. Uno usa el lenguaje habitual para que los demás puedan entenderle.

  10. Ramón García dice:

    Por otra parte, me llama la atención la generosidad con que se trata en este blog a quien ningunea absolutamente a todos los sectores reformistas y partidarios de un debate racional (Politikon, Hay Derecho o Nada es Gratis).

    Siempre me pareció sospechoso que las posturas racionales estuvieran ausentes de los debates que Pablo Iglesias dirigía en Fort Apache o La Tuerka (en cambio, extremistas de Intereconomía y otros sin problemas) En la estupenda entrevista de Galicia Zero clarifica su estrategia:

    «P: En la derecha, ¿existe posibilidad de auge de nuevos liderzagos y coaliciones regeneracionistas?

    R: Son nuestros adversarios de verdad. Aunque seguramente no hayan leído a Joaquín Costa. Yo lo digo siempre, cuando me llevan a La Sexta Noche estoy encantado de que mis adversarios sean Inda, Marhuenda o Alfonso Rojo. Ahí hemos ganado antes de empezar a discutir. Los que de verdad me preocupan son Revilla, Albert Rivera, Rosa Díez o los de UPYD, porque además son muy buenos.»

    Ya sabéis, Politikon. Sois parte del enemigo (aunque no se os cite explícitamente). Os ningunean por algo.

  11. Dani dice:

    ¡Qué grandes intervenciones, Ramón García!
    1-«de bajo capital humano» tal vez no sea la expresión más correcta, Alfonso IX, pero se entiende perfectamente lo que Ramón García quiere decir: «tener poca formación». Ya está, tampoco era tan difícil.
    2-Es verdad que hay cierto sesgo en cuanto a la relevancia que se da a las alternativas al PPSOE en el blog, ya que Podemos esta siempre pululando mientras que C’s y UPyD son fantasmas. Mi opinión es que hay cierto sesgo en el blog hacia una vía «PSOE regeneracionista», de modo que el rival fácil es Podemos y el rival difícil es «C`s + UPyD». Digo lo de fácil porque aunque la gente comparta la crítica de Podemos al estado actual de cosas, las soluciones que propone no hay quién se las coma. De hecho, están buscando economistas desesperadamente que respalden y argumenten las ocurrencias que en este campo defienden porque ellos mismo se dan cuenta de que por esta vía cojean muy feamente. La crítica es fácil, y más en la situación en la que está el país. Los otros dos partidos comparten mucha de la crítica de Podemos, pero las soluciones que proponen son menos espectaculares y más realistas. Y esto no es opinión.
    3-Lo mejor de todo, lo más curioso, es que algo de lo que se han dado cuenta en Podemos (dónde esta el rival) ha pasado por alto en UPyD y C’s. Ninguna de estos dos partidos parece darse cuenta que su recorrido hacia posturas más de izquierda o más liberales tiene mucho recorrido (fidelidad de voto), sino que el verdadero margen de cambio se encuentra en clases con poca fidelidad de voto: sectores jóvenes-estudiantes de Podemos.
    Un saludo.

    • PaulJBis dice:

      Yo creo que hay una explicación más inocente a toda la atención que se está prestando a Podemos: son el «juguete nuevo». UPyD lleva ya unos años ahí, y parecen haberse estancado, mientras que Podemos es la novedad, el partido que de la nada ha salido hasta colocarse casi como tercera fuerza política. Lógico que se les preste más atención desde todos lados…

      …lo cual nos lleva a la pregunta de por qué UPyD se ha estancado. Aparte de los errores de comunicación que hayan podido cometer, el problema es que sus propuestas en lo económico son moderadas, regeneracionistas, matizadas, muy poco radicales… y eso no tiene atractivo. En una crisis como la que estamos viviendo, lo que pide la gente es «sangre», y eso Podemos lo ha percibido muy bien.

      Básicamente, estamos en un momento en el que, como bien describe Ramón García, a unos y a otros les interesa polarizar el debate político, y como todos sabemos, en una pelea el que está en medio es el que se lleva las hostias de los dos lados. Eso es lo que le está pasando a UPyD.

      • Alatriste dice:

        Bueno, para empezar mi opinión personal es que a Podemos le va a pasar exactamente lo mismo que a UPyD… que va a descubrir que llegar a un 10% de los votantes no es fácil, no, pero que saltar de ahí y llegar al 20% es tan complicado que en comparación lo hecho hasta ahora ha sido un paseo silbando con las manos en los bolsillos.

        Y ya pasando a UPyD yo diría que el programa económico moderado es solo una parte de un problema mayor y más grave. UPyD ha intentado resolver el problema de cómo crecer a base de intentar ser «transversal», que en la práctica ha significado votar siempre en contra (especialmente si todo el resto votaba a favor), no definirse como derecha o izquierda, no aliarse ni con PP ni con PSOE ni por supuesto con nacionalistas… una postura que han llevado a extremos delirantes, como cuando el único diputado de UPyD en Asturias era decisivo pero el partido decidió no decidir; o como presentarse a las elecciones sin posición alguna sobre el aborto ni sobre la cadena perpetua. Y no, no es broma

        http://politica.elpais.com/politica/2011/11/12/actualidad/1321120765_988440.html

        Este es un ejemplo por desgracia típico: UPyD no solo votó en contra de la ley de plazos de 2010, es que presentó una enmienda a la totalidad, pero con toda probabilidad votaría también en contra de la ley Gallardón si llegase al Congreso.

        • juan dice:

          Sin querer defender a UPyD, en Asturias básicamente dejó a la lista más votada (como IU en Extremadura no facilitando la investidura del PSOE que tenía menos votos y escaños).

          Respecto a lo de Podemos, se percibe demoscópicamente diferente, como explica Belén Barrero, tiene más recuerdo de voto que el voto que tuvieron, es decir, hay gente que no sólo les va a votar sino que quiere decir «que ya les votó», como arrepentidos de su ¿último? voto útil quien sabe si al PSOE.

          • Alatriste dice:

            Bueno, tengo que empezar por decir que si es cierto que debe gobernar la lista más votada, entonces Rajoy y Espe tienen razón y la reforma de las elecciones locales del PP es cojonuda, es más, aún se queda corta: la ley electoral debería prohibir las «coaliciones de perdedores» y dar automáticamente el 50% más uno de los escaños al más votado.

            Personalmente sigo pensando que quien debe gobernar es la mayoría y que eso no es lo mismo que «el partido más votado»…

            Pero el caso asturiano es más sangrante porque había un empate entre 22 diputados de PSOE+IU y 22 de PP+FAC, más uno de UPyD que hubiera sido decisivo si UPYD hubiera querido decidir. Pero si no debía decidir porque debe gobernar el más votado ¿Entonces de qué sirve votar a un partido minoritario? ¿Para qué votar UPyD o IU, si hasta cuando alcanzan una posición que les permite aplicar una parte de su programa deben abstenerse de emplearla?

            Dejémonos de hojas de parra y veamos la estatua como es: IU está apoyando al PP en Extremadura y lo hace porque le ha dado la gana, no porque la formación tenga un código moral que le obliga a ello. Si lo tuviera, el presidente de Andalucía sería Javier Arenas.

            Y pasando al recuerdo de voto, el tema es que ese precisamente es el punto de las encuestas que una y otra vez le convence a uno de que la gente miente más que habla: por un lado casi nadie admite haberse abstenido, por otro el número de los que dicen haber votado a quien ganó siempre es mucho mayor que el real.

            • MuGaR dice:

              En Asturias si se decidió, de hecho se llegó a un acuerdo de legislatura que luego se fue al traste ( http://weblogs.upyd.es/asturias/wp-content/uploads/2012/07/AcuerdoUPyDFSAPSOE.pdf ).

            • juan dice:

              No digo que deba gobernar la lista más votada, sino la mayoría «más naturalmente próxima», y a lo mejor PSOE+IU+UPyD en Asturias iba entre extremos demasiado lejanos, y a lo mejor también la FAC+PP+UPyD también, por lo cual se quedaron en medio, y para la investidura apoyaron al que tenía más votos directos para facilitar que alguien gobernase y no repetir por tercera vez las elecciones.

              Existe la opción de dejar gobernar a la lista más votada si es más complicado establecer coaliciones con las otras opciones.
              Incluso existe la posibilidad apoyar solo para la investidura a un partido que no fue el mayoritario pero sin coaligarse (lo que hizo el PP en Euskadi aupando a Patxi López). Ya ves, los que creen en lo de la lista más votada, por no recordar cuando lo intentaron Mayor y Redondo.

    • Alatriste dice:

      Bastante de acuerdo en todo, solo añadir que eso no le ha pasado solo a C’s y UPyD (donde es evidente que gente como Sosa Wagner se plantea, y con mucha razón, que si se hubieran unido solo se hablaría de Podemos después de llenar la primera plana hablando de como UPyD-C’s había llegado a un 10% igualando o hasta superando a IU) sino que sobre todo le ha pasado a la misma IU, que ve como un recién llegado no solo alcanzó un 8% en las europeas, es que ve como en las encuestas realizadas desde entonces los supera ampliamente… y aunque de las encuestas «no se come» y a veces fallan como escopetas de feria, si que dan pistas muy serias de por dónde pueden ir los tiros.

    • Ramón García dice:

      La causa fundamental del éxito de Podemos es el control de la televisión.
      El propio Pablo lo explica en una la charla «Qué debe decir la izquierda»:

      « En el año 2012 el 90 % de un discurso político es un dispositivo audiovisual […] El 95 % de un liderazgo es un dispositivo audiovisual. El 95 % de una campaña, de una campaña electoral, una campaña política es un dispositivo audiovisual. El 95 % de lo que puede decir una organización política es un dispositivo audiovisual. Siempre cuento esto con un poco de mala leche, cuando hablo con dirigentes de Izquierda Unida, y les digo una cosa que es verdad: «A los que salimos en La Tuerka, a mí y a los tertulianos que salimos, nos conocen más los militantes de tu organización que a vosotros porque a vosotros no os ven» »

      Esta es la explicación del pobre resultado de UPYD o Ciudadanos. Pablo Iglesias se atrevió a salir a televisiones de ultraderecha porque sabía que había que salir (además de que no le importa discutir con extremistas), no se pueden ganar elecciones si a uno no le conocen. No importa que Andrés Herzog sea un gran abogado, y autor de la querella a Bankia: la gente no le conoce porque no le ven. Y tampoco importan que Luis de Velasco o Ramón Marcos Allo sean muy buenos parlamentarios.

  12. Dani dice:

    perdón:
    «…no tienen mucho recorrido…»

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