Internacional

Jugando al Apocalipsis. Otra vez.

28 Ago, 2013 - - @egocrata

El partido republicano odia la reforma de la sanidad de Obama. La odia, la odia, la odia. La odia tanto, de hecho, que los tipos han votado derogarla en la Cámara de Representantes más de cuarenta veces (no, no estoy exagerando) en los últimos dos años, a pesar que ninguna de estas votaciones tenía la más mínima oportunidad de ser aprobada por el Senado o firmada por el Presidente. El GOP y sus bases detestan Obamacare con el fulgor de mil soles; les importa bien poco que la ley haya sido declarada constitucional por el Supremo y los votantes reeligieran a Obama en las urnas hace unos meses. Ellos están aquí para llorar, protestar y trollear tanto como sea humanamente posible hasta que se salgan con la suya.

La Affordable Care Act (ACA – el nombre real de Obamacare) realmente no entra en vigor hasta el uno de enero del 2014. En octubre la pieza clave de la ley entrará en funcionamiento, con los mercados de seguros para individuos y pequeñas empresas abriendo sus puertas en internet. El años que viene es cuando el mandato individual, la expansión de Medicaid y los subsidios y créditos para comprar seguros empezarán a funcionar, y Estados Unidos estará, por fin, camino de algo parecido a un sistema de sanidad universal más o menos potable.

Los republicanos son conscientes de algo muy sencillo: una vez un país tiene un sistema de sanidad universal, los votantes nunca lo derogan. Una vez la ACA entre en vigor, la ley empezará su trabajo de redistribución y seguro para los más vulnerables, las prestaciones y regulaciones serán visibles, y la ley será prácticamente inamovible. En los delirios del sector montañés del tea party, el uno de enero Estados Unidos pasará a ser un infierno totalitario socialista donde el gobierno puede controlar y contaminar nuestros preciosos fluidos corporales. Si queremos salvar América, es ahora o nunca.

Uno puede preguntarse, claro está, cómo puede un partido minoritario que sólo controla la mitad de una de las tres ramas del gobierno de Estados Unidos (aunque el Supremo es conservador, ya han dado el visto bueno a la ACA) eliminar la iniciativa estrella de un presidente recién reelegido por amplio margen sin elecciones de por medio. El GOP ni siquiera se las arregló para sacar más votos que los demócratas el 2012; su mayoría en la Cámara de Representantes viene de un gerrymandering entusiasta. ¿Qué puede hacer un partido minoritario e impopular para destruir una ley que odia estos días?

Hay dos respuestas posibles. Una, la realista, es básicamente nada. Obama no va a aceptar la demolición de la ley soñada de la izquierda americana durante los últimos 100 años por el pataleo de un GOP cada vez más impopular. El hombre será buenista y a veces un poco demasiado propenso a negociar con cretinos nihilistas, pero no es imbécil. La otra respuesta, sin embargo, es un poco más preocupante, a pesar de ser completamente absurda. Un sector no precisamente minoritario del GOP, y un porcentaje lo suficientemente importante de sus bases para poder hacer daño en unas primarias, quiere cerrar el gobierno federal y bloquear un incremento del techo de la deuda si Obama no accede a eliminar todo el presupuesto de la ley de sanidad o a derogarla.

¿Os acordáis del techo de la deuda y todas esas divertidas discusiones a mediados del 2011 sobre el tema? Si el Congreso no autoriza al gobierno federal a endeudarse por encima del límite actual en las próxinas ocho semanas, el Tesoro de los Estados Unidos no podrá afrontar sus pagos según el calendario previsto, al no poder emitir bonos para cumplir con sus compromisos de deuda y gasto. Por pura tozudez legislativa del Congreso, el país más poderoso de la tierra, el mismo país que está viendo su déficit público reducirse de forma drástica gracias/ a pesar de tremendos recortes presupuestarios y está pagando unos tipos de interés irrisorios cuando emite deuda, se declarará en bancarrota así por las buenas. Siendo como es la deuda pública americana el refugio hiperseguro de los mercados financieros internacionales, imaginad lo mucho que nos vamos a divertir todos si esto sucede.

Por muy absurdo, nihilista y psicótico que esto os pueda parecer, el partido republicano (o al menos un sector aterradoramente numeroso en la Cámara de Representantes) parece estar considerando seriamente la idea de volar la economía mundial por los aires si el presidente no accede a dejar sin sanidad a los pobres y gente con enfermedades crónicas. John Boehner, el líder del GOP en la cámara baja (y alguien que parece más preocupado de contentar a los chiflados de su partido para conservar su cargo de Speaker que otra cosa) ya ha dicho que el techo de la deuda será un instrumento de negociación para forzar al presidente a cambiar la ley. La Casa Blanca, mientras tanto, ha dicho que el techo de la deuda es completamente innegociable, y que si el GOP quiere destruir la economía mundial por una pataleta allá ellos. Obama se arrepiente de darle a los conservadores la oportunidad de negociar el 2011, y no quiere volver a repetir ese desastre. Y con cierta razón, todo hay que decirlo: el Congreso ha autorizado todo ese gasto público; negar ahora la capacidad de endeudamiento para ejecutarlo es una profunda estupidez. Querer forzar un impago desde la minoría para derogar una ley que fue refrendada claramente por los votantes hace unos meses es de una temeridad increíble, y el GOP está chantajeando al presidente abiertamente con ello.

Lo cierto es que un impago no sólo haría un daño atroz a la economía mundial, sino que además acabaría, a buen seguro, con el partido republicano tal y como lo conocemos. Los moderados del partido llevan meses advirtiendo que la ACA es ley, las elecciones están perdidas y un impago o atrocidad similar destruiría la imagen del partido; si el sector montañés del GOP fuerza la situación,  los votantes probablemente se les tiren encima. El problema, sin embargo, es que por mucho que haya una mayoría de representantes dispuestos a evitar el Apocalipsis (la minoría demócrata y el sector no completamente chiflado del GOP), el Speaker controla la agenda de votaciones, y Boehner se ha comprometido a no llevar nada al pleno que no cuente con el apoyo mayoritario del grupo parlamentario republicano. Si las señales de humo son ciertas y el sector nihilista-sociópata es dominante dentro del partido conservador, dentro de ocho semanas la economía planetaria estará empotrándose en un muro nacido de la estupidez política de una minoría de bloqueo en una de las cámaras del Congreso de los Estados Unidos.

¿Sucederá así? la verdad, no lo sé. Tengo la sensación que Boehner es tozudo, pero no un chiflado, y en el peor de los casos llevará a votación una subida del techo de la deuda sin el apoyo de todo su grupo. Esto probablemente le costará el puesto de Speaker, pero eso es lo de menos; el pobre hombre lleva meses sin controlar su propio partido, así que nadie notará la diferencia. Aunque algunos republicanos parecen creer sinceramente que tienen una gran posición negociadora, lo cierto es que no tienen una salida demasiado fácil.

Aún así, vamos a tener unas cuantas semanas como poco entretenidas. Ya veremos.


21 comentarios

  1. Antonio dice:

    ¿»Gracias» o «a pesar» de los recortes? Decídete, o lo uno o lo otro.

    Por cierto, «nihilistas», «sociópatas», «trollear» (¡viva el respeto al diccionario!), «estupidez política»…? No hace falta insultar para defender una posición política. De lo contrario, te pueden confundir con un «troll» de esos a los que tienes tanto cariño.

    • polkillas dice:

      Parafraseando a Forrest Gump, sociópata es el que hace cosas de sociópatas. Y el partido republicano estadounidense lleva tiempo en una línea que en cualquier otro país sería vista con cachondeo y rechifla.
      Es que no entiendo sus motivos. Roger, ¿puedes explicarlo? ¿Tanto odio le tienen al Obamacare?

      • Hejo dice:

        Hay mucho, pero que muuucho dinero de por medio. Y es que las compañias privadas podrían perder docenas de millones de clientes.

        En otros posts en Politikon se había analizado lo cara que es la sanidad privada en los USA (mucho más que cualquier sistema público europeo).

      • EduardoE dice:

        El problema va mucho más allá de lo que dice Hejo, de la influencia de las compañías privadas, que por otro lado igual pueden salir ganando algo con Obamacare.

        Pero no es eso, sino un odio sociopatico el que el GOP le tiene a Obama, y no precisamente por ser democrata. Desde que Mitch McConnell (líder minotario de los republicanos en el Senado) dijera en público* que el objetivo principal del partido debiera ser que Obama fuera solo un presidente de un mandato, que ese partido cruzo el umbral de la razón.

        Desde entonces el sector extremista (el Tea Party) ha logrado controlar todo el partido a base de amenazas como la del debt-ceiling, el abuso del filibuster como nunca en la historia de EEUU, amenazar a todos sus compañeros moderados de ser antipatriotas y de acabar sus posibilidades de ser reelegidos, y por supuesto de decir que Obama es racista/amigo de los terroristas/extranjero/gay/antipatriota/marxista/lo que diga Rush Limbaugh.

        Por supuesto hay factores adicionales:

        * Que los votantes del Tea Party son en general los «low-infomation voters» con cosas como que un tercio de los republicanos en Louisiana culpe a Obama por la gestión de Katrina ( http://www.huffingtonpost.com/2013/08/21/obama-hurricane-katrina_n_3790612.html !!) o sean derechamente racistas;
        * El gerrymandering como todos los intentos para complicar las votaciones (como lo que hizo Texas de empezar a aprobar cambios un par de horas después de que la Corte Suprema tumbara el Voting Rights Act, la ley que impedia esos cambios)
        * Los medios de comunicación tanto en Internet, Radio o Televisión (¡Fox News!) que promueven constantemente ciertas teorías en contra del presidente.
        * Gente como Donald Trump, Rick Santorum, Sarah Palin, o Michelle Bachmann con más neuronas para hablar que para pensar.
        * Y por supuesto otros como Dean Chambers, el «genio» detrás de «Unskewed Polls» o de teorías como que Obama estaba drogado durante el incidente de Bengazi.

        El odio a todo lo que haga Obama es tan grande, que son incluso capaces de forzar que su propio país no apoye un tratado de control de armas y vote en contra junto con Irán, Corea del Norte y Siria: http://www.reuters.com/article/2013/03/29/us-arms-treaty-un-idUSBRE92R10E20130329

        En fin, ¿que se puede esperar de un partido que esta en contra de todo lo que no sea tener un presidente blanco, recortar impuestos, subir el gasto en defensa y recortar en el sector social, poner el derecho a tener armas sobre cualquier otra cosa en la constitución, y sobre todo odiar a cada minoría posible? ¿Ideas medianamente racionales?

        PD: Y si, lo dijo: http://www.youtube.com/watch?v=W-A09a_gHJc

  2. Víctor dice:

    Aunque los republicanos están chiflados, me imagino que el instinto de autoconservación se impondrá y hará que sean razonables. A estas alturas, (casi) nadie se suicida por una cuestión de principios. Además, Boehner tiene tantos escrúpulos morales como un ejecutivo de Goldman Sachs (lo que, en este caso, es afortunado), y sólo hace falta que un puñado de congresistas republicanos vote con los demócratas para subir el techo de deuda.

    Además, siempre queda la opción de la moneda de platino de un billón de dólares. El ridículo sería estupendo, pero es mejor que el apocalipsis.

  3. Catena dice:

    «El partido republicano (o al menos un sector aterradoramente numeroso en la Cámara de Representantes) parece estar considerando seriamente la idea de volar la economía mundial por los aires si el presidente no accede a dejar sin sanidad a los pobres y gente con enfermedades crónicas.»

    Ahí, ahí análisis serio.

  4. Ramón García dice:

    De acuerdo, pero USA es un país que vive por encima de sus posibilidades, que tiene déficit por cuenta corriente permanente (ver Eurostat http://epp.eurostat.ec.europa.eu/tgm/table.do?tab=table&language=en&pcode=tec00043 ) y una deuda exterior enorme. Tiene un problema estructural de corrupción, de Pork Barrel (mucho gasto innecesario, que obtienen los congresistas para su distrito a cambio de su voto).

    Algo tienen que hacer para mejorar su competitividad. ¿Alguien tiene una idea?

    • Epicureo dice:

      A los mercados de capitales no parece que eso les importe, así que no tienen por qué hacer nada. Mientras haya países con superávit permanente tiene que haber países con déficit permanente, y USA es la mejor opción.

      Aunque esto no tiene nada que ver con el sistema sanitario.

  5. Frost dice:

    ¿Será por esto que Obama tiene tanta prisa ahora por invadir Siria? ¿Para convencer a los republicanos que los valientes soldados americanos no pueden quedarse sin balas a mitad de la guerra? (es un decir, pero estoy seguro que a unos cuantos republicanos les convence el argumento).

  6. […] Jugando al Apocalipsis. Otra vez […]

  7. Capitalismo y globalización dice:

    La definición de sociópata a quién está en contra de la sanidad pública y universal me parece que encaja como un guante.

  8. […] sobre el debate presupuestario entre demócratas y republicanos, y como el previsible desacuerdo puede acabar horriblemente mal. Un par de semanas después, tras la distracción Siria, las cosas parecen ir a […]

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