historia

El mercado laboral español: la posguerra y el franquismo

19 Feb, 2012 -

Esta serie sobre la historia de las instituciones del mercado laboral español la escribí hace bastante tiempo para el blog antiguo. Voy a reproducirla aquí con alguna pequeña corrección por su interés actual. Quiero subrayar que no pretendo ningún tipo de originalidad en lo que voy a explicar: se trata básicamente de un digesto de lo que se puede encontrar en cualquier manual de historia económica.

Los años de la posguerra están marcados por lo que Carreras y Tafunell llaman el “Contrarreformismo social”. Si durante la Segunda República los sindicatos eran legales y habían logrado importantes cambios en la legislación social –destaca por ejemplo la ley de jurados mixtos para la negociación de salarios- su existencia también estuvo asociada a una importante conflictividad social que el nuevo régimen buscó revertir. A la percepción del carácter maligno del sindicalismo de clase y la legislación social, se sumó la voluntad de pagar favores políticos a empresarios que habían apoyado al bando nacional durante la guerra.

La filosofía social del franquismo, consagrada en el fuero del Trabajo de 1938, se basaba en dos pilares fundamentales. El primero de ellos, el sindicalismo vertical basado en el modelo corporatista italiano, agrupaba a todos los agentes del proceso productivo en cada rama de producción. Se prohibieron los sindicatos de clase y las decisiones económicas sobre la fijación de salarios y legislación industrial pasaron a estar supeditadas a decisiones políticas- una característica que acompañó al régimen hasta sus últimos días. El segundo pilar era un férreo control salarial. Durante la posguerra los salarios cayeron hasta el punto de que en 1950 el salario real llegó a ser alrededor de la mitad que en 1936 como consecuencia de la inflación descontrolada y la congelación del salario nominal. Esta caída del poder adquisitivo de los salarios contribuyó al hundimiento del consumo que arrastró al resto de la economía y llevó a un reagrarización masiva de la mano de obra en consistencia con la política agraria del
Nuevo Estado.

A partir de 1950, las instituciones del régimen comenzaron a suavizarse. La fijación de salarios y la contratación se liberalizó parcialmente (ley de convenios colectivos de 1958) y se fijó un salario mínimo (1963). El sindicato vertical se horizontalizó parcialmente permitiendo cierto grado de participación. El periodo que sigue al plan de estabilización (1959) (plan de ajuste estructural del FMI) está marcado por la “edad de oro” de la economía española, caracterizada por un aumento de la productividad, del empleo y de la población activa y una industrialización sostenida, con un caída del paro que en los años 60 llegó a ser del 4%.

La época que sigue al plan de estabilización fue vendida por el régimen como el “milagro español” omitiendo el hecho de que la principal de sus causas no era la buena gestión de las instituciones franquistas, sino el terreno que quedaba por recuperar después de los daños infligidos por la locura de los Suanzes y compañía a la economía española. El “Milagro Español”, sin embargo, era un gigante con pies de barro. El afán modernizador se dejo de lado una vez que la economía empezó a crecer poniendo en marcha los llamados “planes de desarrollo”, un engendro dirigista copiado de la planificación indicativa francesa de la posguerra. Los problemas estructurales del modelo se hicieron evidentes, como veremos en el próximo post, con los shocks de oferta de los 70.


5 comentarios

  1. polkillas dice:

    A esta entrada le falta un «T0 be continued».

  2. Shine dice:

    A mí se me ha ocurrido una redacción cojonunda para el despido en mi imaginaria reforma laboral:

    «Si el despido es declarado improcedente, podrá optarse entre la readmisión en igual puesto e idénticas condiciones que venía desempeñando o se le indemnice en una suma que fijará el Juzgado de lo Social, teniendo en cuenta el tiempo de servicio en la empresa, sin que pueda exceder del importe de 12 mensualidades»

    Ideas que se me ocurren.

  3. Cives dice:

    Shine, tu comentario no tiene nada que ver con el tema del post. No te lo he borrado esta vez, la próxima vez sí.

  4. Shine dice:

    Agradeciendo el aviso, no dispare tan rápido vaquero. La cuestión queda planteada.

  5. […] serie de Cives sobre mercado laboral en España (aún no cerrada):  La posguerra y el franquismo, El fin de la Edad de oro, los shocks energéticos y la […]

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