Economía

Los motivos de Ignacio (I)

17 Oct, 2011 - - @jorgesmiguel

Esta entrada es la primera de una serie de siete escritas en colaboración con otro ciudadano, buen amigo de todos uds. De ahí el plural, que no mayestático.

Aunque los fiskings son una cosa más bien pasada de moda, hemos pensado que no carecería de interés analizar con cierto detenimiento cada una de las siete razones que Ignacio Escolar avanzaba el pasado 12 de octubre para apoyar las movilizaciones del 15O. El post de Ignacio está escrito bajo forma de declaraciones de buenas intenciones y grandes principios con los que, en general, nadie o casi nadie podría estar en desacuerdo; pero que, en nuestra opinión, están lejos de justificar lo que él quiere justificar. Detrás de todas esas bellas declaraciones de principios se encuentran, imaginamos, premisas y propuestas alternativas concretas que, como sucedía en el famoso cuadro Lenin en Varsovia, están presentes al tiempo que ausentes. Nos vemos obligados por
tanto a recurrir a un ejercicio de reconstrucción del pensamiento escolariano. Esta hermenéutica aventura de “ir hacia el otro” corre naturalmente el riesgo de hacer violencia al rico pensamiento de Ignacio, especialmente si tenemos en cuenta las limitaciones del formato en el que escribimos; algo por lo que nos gustaría disculparnos con él por adelantado.

1. Porque no me resigno a que de esta crisis sólo podamos salir agachando la cabeza, apretando los dientes y renunciando a lo que tantos años costó construir.

Lo primero que nos viene a la cabeza ante este comentario es algo que preside el conjunto de sus reflexiones: todos estamos en contra de todo lo malo y a favor de todo lo bueno, en lo que diferimos es en el rango de alternativas que existe; y lo cierto es que cuando un país en su conjunto ha acumulado una cantidad considerable de deuda frente al exterior no existen muchas alternativas distintas a la de, de una u otra forma, devolver esa deuda. Y sí, eso implica pasar unos años produciendo más de lo que gastamos.

Un segundo aspecto que llama (gratamente) la atención es ver cómo Escolar y los suyos parecen de repente haberse convertido en los guardianes del acervo heredado del pasado. Nuestra percepción es que la gente más involucrada en términos generales en el 15M se caracterizaba hasta hace poco por cierto rechazo maximalista al «sistema», por un escepticismo respecto al papel de los partidos políticos, por la creencia de que el Estado de Bienestar y el proyecto socialdemócrata de combinar la igualdad y la redistribución con la economía de mercado y la eficiencia económica son insuficientes, así como cierto grado de abstencionismo político. Leyendo el párrafo de Ignacio uno tiene la impresión de que el estado de cosas actual es apenas algo menos que maravilloso. Nos felicitamos por lo que ello tiene de reconciliación con lo real, pero no deja de sorprendernos que gente que reniega casi por completo de la política formal le tenga tanto apego al legado concreto de muy concretos gobiernos europeos y españoles de las
últimas décadas. Bajo las retóricas de novela de Víctor Hugo de Ignacio y tutti quanti, lo que ha habido de verdad en Europa y en España no son tanto «conquistas» sino un proceso de búsqueda de consensos a partir de la renuncia a los programas máximos. Choca un tanto que algunos se quieran retratar ahora como protagonistas de la historia del S. XX al tiempo que, como veremos, son más bien reacios a responsabilizarse de sus decisiones, votos y opiniones de anteayer.

Finalmente, y en cierta contradicción con lo anterior, está el planteamiento de lo que uno de nosotros ha llamado alguna vez la «socialdemocracia imaginaria». Se trata del discurso de que existe una socialdemocracia auténtica, fetén, de verdad, con un gran compromiso con la igualdad y que no tiene en cuenta preocupaciones burguesas como el empleo, el crecimiento, la inflación o la eficiencia económica. Pero esta «socialdemocracia» no ha gobernado en un solo país de Europa occidental en los últimos 30 años; los partidos socialdemócratas realmente existentes, los que han gobernado, han sido socialdemócratas de mentira que se han preocupado por mantener la inflación y el déficit a raya y, en la medida de lo posible, por redistribuir renta. El problema con esta visión es que en el caso de España es totalmente falsa (no hubo época dorada de
la socialdemocracia) y, en donde puede tener algo de verosimilitud, pasa por alto el hecho de que determinadas políticas e instituciones no son sólo un problema de elección política, sino que tienen mucho que ver con cosas como la demografía o el patrón de crecimiento de la economía. La reticencia a cualquier tipo de reforma del Estado de Bienestar de la Izquierda Auténtica©, así como esa visión mítica, idealizada y nostálgica de un pasado que nunca existió tiene -de manera nada sorprendente- mucho en común con un cierto talante reaccionario.


23 comentarios

  1. Manuel dice:

    Hombre! Este post es una contradicción en sí mismo, por un lado no te resignas a perder lo conseguido y por otro la socialdemocracia es no vale porque no ha gobernado en estos últimos 30 años de los cuales estos últimos 15 han sido totalmente perdidos, y para más inri nombras España (que no ha tenido una época dorada desde Franco ¿no?). Los mejores años de España han sido los 80, donde todo el mundo se dedicó a trabajar , a ahorrar (y a ser felices), los niños nos formamos (y muy bien) y a la vez fuimos felices (en la calle y en el campo sin TANTA BARRERA PRIVADA y estúpidos «expertos económicos»), sin embargo llegaron los 90, el fin de ciclo, las VALLAS en todos los lugares , el pago por uso de pistas deportivas (y las pistas de los colegios cerrados), las playstation (y el agilipoyamiento de las personas), las BOLSAS , la conciencia económica y el egoismo GENERALIZADO. Si de verdad piensas que no ha exisitido una época dorada del socialismo NO VIVIMOS EN EL MISMO PAÍS, así
    que no merece la pena seguirte…

  2. […] Los motivos de Ignacio (I) politikon.es/neoconomicon/2011/10/17/los-motivos-de-ignac…  por Sigerico_Redivivo hace nada […]

  3. Troll de Internet dice:

    Como en las seis entradas restantes demuestres la misma capacidad de compresión que en esta, mejor paramos el serial.

    Punto 1) Yo no me he endeudado. No he pedido ningún crédito ni tengo deuda alguna con nadie. Si te has endeudado tú, o el banco, la deuda la pagas tú y el banco. Y si para ello hay que trabajar más y ganar menos, trabajas tú más y ganas tú menos, que bastante tengo yo ya con uno de los mayores volúmenes de horas trabajadas de la UE, y un nivel salarial entre los más bajos. Que por cierto, encima ni siquiera es real y el poder adquisitivo es aún menor. Ya estoy harto de gente viviendo en Londres y en NY que ganan sueldos de 6 dígitos pero que nos piden a los que ganamos 600 que trabajemos más y cobremos menos.

    Punto 2) El hombre de paja que te montas para, ya de paso, soltar tu habitual coz al 15M no merece mucha consideración. Como siempre, coz basada en el desconocimiento, caricaturización y juicios de valor que nadie te ha pedido. No veo la incompatibilidad de querer un sistema social más justo y redistributivo y quejarse de que eliminen la poca redistribución que actualmente existe. Puede que sea un perroflauta indignado y lo que mole sea decir que no hay que meter a ningún banquero en la cárcel aunque nos hayan mandado a todos al hoyo, o que si un policía te cruje la cara a porrazos no pasa nada porque a veces el mundo es así de duro.

    Punto 3) La socialdemocracia no existe y Olof Palme, Lula o Gerhardsen son los padres.

  4. Gorgias Marat dice:

    Lo que dices Manuel es típico del pensamiento reaccionario. «Mi infancia fue estupenda, los niños de ahora son gilipoyas, y cualquier tiempo pasado fue mejor.» Una sugerencia, te ruego que compares el número de muertes que hubo por Heroína y las infecciones por VIH entre 1985 y 1995 y entre 1995 y 2005, y ya entonces me cuentas si los jovenes de los 80 fueron tan felices. Cada época tiene sus retos, sus desafíos, sus aspectos positivos y sobre todo la melancolía de los que la recordamos en función de nuestras experiencia y no sobre datos rigurosos.

    Te recomiendo estos gráficos a modo de ejemplo sobre los magnificos 80 y los terribles 90 para los jovenes.

    http://www.pnsd.msc.es/Categoria2/publica/publicaciones/Guia2008/heroina.htm

    Grafico 2.4.2 http://www.pnsd.msc.es/Categoria2/observa/pdf/MortalidadDrogas.pdf

    Gráfico 2.3.1

  5. Gorgias Marat dice:

    Perdón falta un gráfico sobre infecciones VIH

    Gráfico 2.3.1
    http://www.pnsd.msc.es/Categoria2/observa/pdf/Infecciones.pdf

  6. Gracias por el homenaje. Pero si de verdad queréis saber lo que pienso, creo que es más fácil que me hagáis una entrevista, en vez de imaginar qué pasa por mi cerebro. Estáis poniendo en mi boca (o en mi pensamiento) cosas que ni he dicho ni comparto. Es una falacia clásica: el hombre de paja.

    http://es.wikipedia.org/wiki/Falacia_del_hombre_de_paja

  7. cives dice:

    «Estáis poniendo en mi boca (o en mi pensamiento) cosas que ni he dicho ni comparto.»

    1. ¿Cuáles?

    2. Si nosotros no somos capaces de interpretarte correctamente a partir de la lectura de tus tuits y posts ¿qué te hace pensar que el resto tus lectores sí lo es? Esto es en parte una invitación a que matices tus puntos de vista o expliques de forma más concisa una serie de cosas que, como decíamos en la introducción, todo el mundo comparte sin necesariamente estar de acuerdo las implicaciones que tú pareces darle.

    3. Como ya te comenté en una ocasión, no tenemos -yo al menos no- nada en contra de ti, sino de tu personaje o tu identidad pública. Así nos gustaría que te tomaras la alusión personal no como un «ad hominem» (Jorge insistió en que no incluyéramos vídeos humorísticos para contextualizar el análisis de tu discurso) sino como un mecanismo expositivo en el que hemos usado tus siete puntos para presentar de forma metódica una serie de contra-argumentos a un cuerpo de ideas que desde nuestra percepción mucha gente comparte y que tú te has molestado tan amablemente en resumir para nosotros. Obviamente, nuestros argumentos tienen una validez limitada a nuestra interpretación, correcta o no pero en cualquier caso útil, de los tuyos.

  8. Esta frase, por ejemplo:

    «No deja de sorprendernos que gente que reniega casi por completo de la política formal le tenga tanto apego al legado concreto de muy concretos gobiernos europeos y españoles de las últimas décadas».

    No es cierto que reniegue de la política formal. Al contrario.

  9. Per[la|pau]* dice:

    Nacho, no entres al trapo. La gente que primero falta y te caricaturiza y luego dice que lo hace para alentarte a que demuestres que eres «inocente» no merece mayor consideración.

    Hoy para mi Politikon ha perdido muchísimos enteros.

  10. cives dice:

    Sí, por eso ese párrafo se refiere explícitamente más al movimiento que a ti; fíjate y está planteado de un modo particularmente prudente:

    » Nuestra percepción es que la gente más involucrada en términos generales en el 15M se caracterizaba hasta hace poco…»

    Pienso que es una buena caracterización de la gente de «no les votes», «no nos representan», etc que tienden a plantear que la democracia de verdad es la que se hace en Sol y no en la carrera de San Jerónimo con los que, en cierta medida, haces causa común en este tema concreto. Obviamente caracterizar a un conjunto de gente tan heterogéneo en unas líneas es complicado y probablemente injusto, pero es inevitable si uno quiere criticar un movimiento o una iniciativa.

    Pero luego está el tema de que no está muy claro -y esto sí que tiene que ver contigo más concretamente- a quién reivindicas en ese párrafo como agente de las «conquistas» (que suponemos que será alguien involucrado en la política formal) ¿A Felipe, a Suárez, a Aznar, a Zapatero, a Prieto, a Largo Caballero, a Viriato, al hombre de Atapuerca? Me sorprendería (¡gratamente!) verte haciendo una laudatio de la política económica de Boyer o Solchaga, la verdad, no digamos ya de Rato o Fernando Abril.

  11. cives dice:

    «La gente que primero falta y te caricaturiza»

    Los lectores de Ignacio tenéis un sentido del humor un tanto selectivo, si me permites la apreciación. Lo llaman periodismo y no lo es.

  12. cives dice:

    Hoy para mi Politikon ha perdido muchísimos enteros.

    No hombre, pensábamos que estabais acostumbrados. Fiskear a Ignacio tiene una larga tradición entre los blogueros de esta página. Mira este, por ejemplo:

    http://ego-marx.blogspot.com/2008/10/contra-la-sabidura-convencional.html

  13. Per[la|pau]* dice:

    No lo has pillado, pero es que estaba tan amagado que lo entiendo. Sorpresa: he sido lector de Politikon hasta hoy mismo.

    Y la tradición será larga, pero más bien poco intensa, ¿verdad? Sino no hubieras retrocedido hasta 2008 para ejemplificar lo que decías.

    Por cierto, lo llamáis determinismo y no lo es.

  14. Rocamadour dice:

    De lo peor que he leído por aquí. Y ese tonillo displicente…

  15. Dices:

    Pienso que es una buena caracterización de la gente de “no les votes”, “no nos representan”, etc que tienden a plantear que la democracia de verdad es la que se hace en Sol y no en la carrera de San Jerónimo con los que, en cierta medida, haces causa común en este tema concreto

    Pues no. No hago causa común con «no les votes» y tampoco me habrás visto reivindicar el «no nos representan» (aunque yo ese lema lo entiendo más como una crítica a la lejanía de los políticos frente a los problemas de la ciudadanía que como una negación de la democracia representativa). A esto me refiero con el hombre de paja. Seguid sin mí, y mucha suerte desenmascarando a ese villano que os habéis inventado.

    Salud.

  16. […] Seguimos con la segunda entrega de la serie que comenzaba ayer. […]

  17. zhurrer dice:

    Menuda entrada, madre del amor hermoso… A ver si me las arreglo para recibir en el tas reader sólo las entradas de Senserich, por qué creo que hoy se ha tocado techo en mal gusto.

    Ya dije en su momento que de tanto querer ir contracorriente se estaba rozando el ridículo.

  18. Jorge San Miguel dice:

    Ignacio:

    No nos hemos inventado ningún villano ni hay nada que desenmascarar: tú propones unos motivos para apoyar una movilización y nosotros los tomamos como representativos -porque, lo quieras o no, tú sí que los representas en cierta forma; eres una de sus referencias claras- del 15M y las criticamos. Ya ves, pensábamos que todo esto iba del debate ciudadano, la deliberación democrática, los nuevos cauces de participación y tal. Supongo que serás capaz de apreciar que bajo las gracietas y unas alusiones personales bastante inocentes hay argumentos para el debate.

    Por otra parte, y dado el nivelón sideral de tus «defensores» en este hilo, que flaco favor te hacen, te sugiero humildemente que consideres adoptar esta tonada como himno en la blogosfera:

    http://youtu.be/4GMTyCmVHZA

  19. No sé si eres consciente, Jorge, de que los lectores que aquí opinan son los tuyos, no los míos. Tú verás si quieres seguir insultando a ese público «tan tonto» que tienes, estás en tu casa.

    Supongo que serás capaz de apreciar que bajo las gracietas y unas alusiones personales bastante inocentes hay argumentos para el debate.

    Supongo que serás capaz de entender que con gracietas y alusiones personales, la capacidad para el debate merma considerablemente.

  20. Jorge San Miguel dice:

    Ignacio, yo hace tiempo que a según qué tipo de lector le aplico aquello que decían en Amanece que no es poco: «No te dejo mi novela para que la leas, que me la jodes». A los que vienen de Menéame se les reconoce bastante bien, y luego están los trolls de guardia, que siempre te están dejando de leer pero nunca se largan de verdad. Me importa poco si me leen y, como decía Churchill, no voy a perder el tiempo discutiendo con el mono cuando está el organillero en la habitación.

    Por lo demás, si quieres puedes contestar al siguiente post donde, como verás, no hay gracietas ni alusiones personales y sí, creo, cuestiones bastante pertinentes.

  21. Manuel dice:

    «Gorgias Marat» ya estamos con el insulto fácil, yo creo que fue mejor y punto, de nada me sirven las estadísticas de muerte, teníamos más libertad y como consecuencia los a los niños le pasaban cosas y había un desconocimiento del mundo de las drogas (aunque veremos cuantos enfermos mentales hay dentro de 10 / 15 años por las drogas de ahora ). ¿Estando en casa encerrados con una playstation somos mejores?

  22. Manuel dice:

    Y es más los padres con ciento y poco mil pesetas tenían pisos de 100m (pagándolos a 15 años), alimentaban a varios hijos e incluso tenían casa de campo. Sí, los padres trabajaban 12 horas, pero las madres normalmente ninguna. Hoy día trabajan ambos padres (o sea 16horas), tienen una hipoteca a 40 años (por lo que es muy probable -por la extensión en el tiempo- que un miembro se quede en el paro y pierdan la casa, ¡y a ver quien es el guapo que con un sueldo medio tiene casa de campo! ¿Estamos mejor?

  23. Es lo que hay dice:

    Troll eat Troll

Comments are closed.