«(…) the problem we face is not a simple matter of «the market» versus «the state», but of specific institutional mechanisms that can provide particular economic agents, including the state, with incentives and information that will lead them to behave in a collectively rational manner».
Lo decía Adam Przeworski en un paper de 1992, precisamente quejándose de los hooligans neoliberales que metían en un mismo paquete (negativo) cualquier cosa que viniese del «Estado». Es curioso ver cómo esto mismo puede aplicarse hoy en día a mucha de la retórica crítica sobre los supuestos «mercados».
Al leer tu post me has recordado una serie de docus de un periodista de la BBC llamado Adam Curtis, «The Trap»
http://www.youtube.com/watch?v=uAluyt5_kic
Hay una frase de Karl Polanyi en La gran transformación que me encanta: «el laissez-faire fue planificado». No existen mercados libres, porque los mercados los crean y regulan (de manera más rígida o laxa) los Estados. Realmente, el debate debería ser el modo en que las instituciones de los Estados (que son las que votamos para que gobiernen) pueden y deben regular la actividad económica.