Uno de los problemas que se menciona a menudo del sistema de salud americano es que limita la movilidad laboral. Dado que la mayoría de trabajadores tienen su seguro médico a través de la empresa, muchas veces estos prefieren quedarse donde están con cobertura médica a arriesgase a ir a una start up ambiciosa, una empresa con más expectativas de crecimiento o lanzarse a crear un negocio desde cero.

El problema, claro, es que para decir esto con seguridad nos faltan datos empíricos. Por fortuna, tenemos una experimento natural en Medicare, el seguro público universal que cobre a todos los mayores de 65 años. Robert W. Fairliea, Kanika Kapurb y  Susan Gates han decidido medir si la tasa de creación de empresas es menor a los 64 años que a los 65 para residentes en Estados Unidos – si esto fuera cierto, veríamos que la gente es más proclive a convertirse en emprendedores cuando la red de seguridad es más fuerte.

¿El resultado?  La diferencia es muy marcada. Lo que es más importante, el «salto» sólo ocurre entre 64 y 65; no hay incrementos o significativos en ninguno otro cambio de edad. Es decir, el estado de bienestar puede ayudar a los emprendedores. No es suficiente por sí solo, pero queremos que esté ahí.

(vía Ezra Klein)